MCT: AUTOSUFICIENCIA
Memoriza: «Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer.» Juan 15:5
Lee: Jueces 16:20 – 21
20 Y le dijo: !!Sansón, los filisteos sobre ti! Y luego que despertó él de su sueño, se dijo: Esta vez saldré como las otras y me escaparé. Pero él no sabía que Jehová ya se había apartado de él.
21 Mas los filisteos le echaron mano, y le sacaron los ojos, y le llevaron a Gaza; y le ataron con cadenas para que moliese en la cárcel.
BIBLIA EN UN AÑO: Génesis 21 – 24
MENSAJE
La «A» en nuestra ecuación sobre Resistencia en las «Matemáticas de Cristo en Ti» (MCT) significa Autosuficiencia (si no entiendes, por favor, ve a los devocionales de los días 11 y 12 de Enero 2021). La mayoría de las veces, lo que muchas personas llaman autosuficiencia es pura dependencia en su carne en vez de en Dios. En Daniel 4:28 – 37, vemos como esta actitud le metió en problemas a Nabuconodosor. Él dijo «¿no es esta la Babilonia que yo he construido?» Como resultado, Dios le envió a comer la hierba en el bosque por siete años para probarle que todo lo que él tenía era gracias a Él. Cuando volvió, él reconoció a Dios como el Altísimo que gobierna en los asuntos de los hombres.
La lectura Bíblica de hoy nos cuanta la historia de Sansón. Este hombre había vencido a un ejército entero con la quijada de un asno. Él realmente era fuerte. Desafortunadamente, no se dio cuenta de que esta fuerza no venía de él sino de Dios. Es evidente esto porque si miras las hazañas que él alcanzó, verás que todos los relatos sobre sus hazañas empiezan diciendo «Y el Espíritu del Señor vino sobre él» (Jueces 14:6, Jueces 14:19, Jueces 15:14). Un día, después de que el Espíritu de Dios le abandonara, él dijo «me levantaré y saldré como en otras ocasiones» (Jueces 16:20) pero él fue avergonzado. No importa lo dotado o las habilidades que tengas, sin Dios, no eres diferente que la arena de la playa.
Muchas veces, cuando escuchamos los testimonios de algunas personas, seguimos viéndoles glorificándose a ellos mismos. Quitan la brillantez de Dios y la ponen en sus propios esfuerzos. En Filipenses 3:3-7, Pablo había estado hablando de si mismo, hasta que algo le advirtió «Ten cuidado», y él rápidamente añadió en el versículo 7 «Pero cuantas cosas eran para mí ganancia, las he estimado como pérdida por amor de Cristo.» Proverbios 3:5- 6 dice;
«Fíate de Jehová de todo tu corazón, Y no te apoyes en tu propia prudencia. Reconócelo en todos tus caminos, Y él enderezará tus veredas.»
¿Quieres que Dios viva en ti y opere a través tuyo? Entonces, no debes de apoyarte en tu propio entendimiento. Debes llegar al punto donde puedes decir que es en Él que vivo, me muevo y soy (Hechos 17:28).
Debemos recordar siempre las palabras del Apóstol Pablo en 2 Corintios 3:5;
«no que seamos competentes por nosotros mismos para pensar algo como de nosotros mismos, sino que nuestra competencia proviene de Dios,»
Punto Clave: No eres nada sin Dios.