Devocional Cielos Abiertos para Adolescentes

PARÁBOLA DEL SEMBRADOR: LAS ESPINAS

Memoriza: «Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo.» 1 Juan 2:16

Lee: Mateo 13:7; Mateo 13:22

Mateo 13:7

Y parte cayó entre espinos; y los espinos crecieron, y la ahogaron.

Mateo 13:22

22 El que fue sembrado entre espinos, este es el que oye la palabra, pero el afán de este siglo y el engaño de las riquezas ahogan la palabra, y se hace infructuosa.

BIBLIA EN UN AÑO: 1 Corintios 7:25 – 40; Salmos 128:31

MENSAJE

La tercera categoría de corazón según su condición en cuanto a la palabra de Dios es aquella cuyos corazones están ahogados con muchas cosas. De hecho, esta categoría es la más común en la Iglesia hoy en día. Los Cristianos en esta categoría son obreros fervientes, puntuales en los servicios, conocidos por todos, pero no reconocidos por el Cielo porque están llenos de deseos mundanos y codicia.

Van a la Iglesia para mostrar sus vestidos. Luchan por posiciones; quieren ser Jefes de Departamento en la Iglesia. Luchan para ser llamados «jefes». Ellos solo quieren hacerse notar. Son personas muy ocupadas haciendo nada para Dios porque están más preocupados con las actividades que con el verdadero servicio y la relación con el Padre. Así pues, cuando se está dando el sermón, ellos están ocupados en alguna parte. No tienen tiempo para escuchar la palabra de Dios pacientemente, tampoco hacen un Estudio Bíblico persona. No hay espacio para la palabra de Dios en sus corazones porque está ocupado con actividades.

Examina tu vida hoy, y si tu estás en esta categoría, aún no es demasiado tarde para arrepentirse.

PUNTO CLAVE: El ser obrero en la iglesia es bueno, pero la relación con el Padre es mejor.