Devocional Cielos Abiertos para Adolescentes

MANOS EXTRAORDINARIAS

Memoriza: «El caballo se alista para el día de la batalla; Mas Jehová es el que da la victoria.» Proverbios 21:31

Lee: Éxodo 17:8 – 13

Guerra con Amalec

Entonces vino Amalec y peleó contra Israel en Refidim. Y dijo Moisés a Josué: Escógenos varones, y sal a pelear contra Amalec; mañana yo estaré sobre la cumbre del collado, y la vara de Dios en mi mano. 10 E hizo Josué como le dijo Moisés, peleando contra Amalec; y Moisés y Aarón y Hur subieron a la cumbre del collado. 11 Y sucedía que cuando alzaba Moisés su mano, Israel prevalecía; mas cuando él bajaba su mano, prevalecía Amalec. 12 Y las manos de Moisés se cansaban; por lo que tomaron una piedra, y la pusieron debajo de él, y se sentó sobre ella; y Aarón y Hur sostenían sus manos, el uno de un lado y el otro de otro; así hubo en sus manos firmeza hasta que se puso el sol. 13 Y Josué deshizo a Amalec y a su pueblo a filo de espada.

BIBLIA EN UN AÑO: Hechos 28: 16 – 31; Salmos 59 – 61

MENSAJE

A lo largo de la Biblia, Dios hizo cosas espectaculares con las manos de sus siervos. Por ejemplo, cuando los hijos de Israel eran perseguidos por los soldados egipcios, en el Mar Rojo. Dios le pidió a Moisés que levantara sus brazos y el mar se partió en dos. También, durante la batalla entre los Israelitas y los Amalaquitas, las manos levantadas de Moisés determinaron la victoria de los hijos de Israel. Podemos ver que las manos de Moisés se convirtieron en algo extraordinario en el momento que el se entregó al Señor para ser el medio que dirigió a los hijos de Dios fuera de la cautividad.

¿Estás listo para que Dios ponga tus manos en las Suyas? El año pasado, Dios le dijo a Sus hijos que siempre que sus manos estuvieran levantadas hacia Él, seguirían ganando. Esto muestra sin duda lo particular que es Dios en cuanto a apoyar a aquellos que lo entregan todo a Él. Salmos 20:7 dice; «Estos confían en carros, y aquellos en caballos; Mas nosotros del nombre de Jehová nuestro Dios tendremos memoria.» Cuando tú levantas tus manos hacia Dios, simplemente estás diciendo, «Señor, lo rindo todo a Ti» También significa que tú dependes de Él a pesar de tu habilidad, tu esfuerzo y tu intelecto. Puedo asegurarte que tu victoria está asegurada.

PUNTO DE ORACIÓN: Padre, entrego todo a Ti hoy. Por favor pon mis manos en las Tuyas.