Memoriza: « Por tanto, lo que Dios juntó, no lo separe el hombre.» Marcos 10:9
Lee: Hebreos 13:4
4 Honroso sea en todos el matrimonio, y el lecho sin mancilla; pero a los fornicarios y a los adúlteros los juzgará Dios.
BIBLIA EN UN AÑO: Hechos 21:1 – 40; Salmos 28 – 30
MENSAJE
Tener relaciones sanas y puras con miembros del sexo opuesto es bueno cuando estás guiado por el Espíritu Santo; sin embargo, salir con un hombre casado o una mujer casada está mal. El concepto de «amante», «querida, querido» o «papito, mamita» que el mundo ha aceptado es una abominación delante de Dios; solo invita a maldiciones para las partes implicadas.
Desafortunadamente, algunos chicos y chicas jóvenes consideran esto como una ruta de escape de la pobreza, en el que la persona más mayor ayuda en la educación del otro o ayuda a la familia con algunas facturas a cambio de placer sexual, mientras que otros simplemente lo hacen por diversión. Este acto es desdeñoso delante de Dios y no debe de ser promovido entre Sus hijos.
Cualquier adulto que comete adulterio con un menor es un destructor de destino. Ese tipo de personas protegen a sus propios hijos pero no les importa lo que suceda con aquellos con los que se acuestan. Algunos incluso usa a su presa para rejuvenecer espiritualmente. Además, tener sexo con ellos es separar lo que Dios ha unido. Recuerda que cualquier cosa que siembres, eso será lo que cosecharás. Si destruyes el matrimonio de alguien hoy, nunca podrás disfrutar de un buen matrimonio. Ten cuidado y arrepiéntete de este acto y si eres culpable de ellos.
PUNTO CLAVE: No vendas tu primogenitura por un trozo de pan. Rompe con toda relación inmunda ahora.