Devocional Cielos Abiertos

SE SANO

Memoriza: «Si, pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios.» 1 Corintios 10:31

Lee: 1 Corintios 10:31

31 Si, pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios.

BIBLIA EN UN AÑO: Lucas 20:27 – 47; 2 Samuel 15 – 16

MENSAJE

¿Has escuchado alguna vez la frase «eres lo que comes»? No puedes estar lejos de lo que comes porque tu comida diaria se reflejará en tu piel, tu azúcar en sangre, el tamaño de tu cuerpo, etcétera. Es por lo tanto imperativo que comas bien. Dios quiere que vivas en buena salud pero tienes que hacer tu trabajo que es comer y vivir correctamente.

Comer correctamente significa comer una comida equilibrada cada día. Una dieta equilibrada es una combinación de la proporción correcta de vitaminas y minerales en una comida. Por ejemplo, está mal combinar arroz con patatas en una comida, en vez de eso, debería de ser arroz y legumbres con pescado o carne, y complementarlo con fruta.

Evita las comidas con demasiada azúcar. Los días en los que enfermedades como la diabetes solo se encontraban en adultos ya se han ido, algunos jóvenes son diabéticos. Así pues, en vez de beber refrescos, toma zumo fresco natural, o agua. Bebe mucha agua, sigue siendo la mejor bebida. También necesitas controlar la cantidad de comida que comes antes de irte a la cama, especialmente si eres una talla grande. Toma comidas ligeras, para que puedas fácilmente levantarte para leer y orar de madrugada.

También, haz ejercicio cada día para estar en forma. Si puedes haz futting o corre por las mañanas. Una larga caminata también es buena; yo he estado haciéndolo por muchas años y me ha ayudado.

PUNTO CLAVE: Vivir y comer bien es tu trabajo, no el de Dios.