Devocional Cielos Abiertos

SIGUE A JESÚS MUY DE CERCA I

Memoriza: «Y Pedro le siguió de lejos hasta dentro del patio del sumo sacerdote; y estaba sentado con los alguaciles, calentándose al fuego.» Marcos 14:54

Lee: Marcos 14:50 – 72

50 Entonces todos los discípulos, dejándole, huyeron.

El joven que huyó

51 Pero cierto joven le seguía, cubierto el cuerpo con una sábana; y le prendieron; 52 mas él, dejando la sábana, huyó desnudo.

Jesús ante el concilio

53 Trajeron, pues, a Jesús al sumo sacerdote; y se reunieron todos los principales sacerdotes y los ancianos y los escribas. 54 Y Pedro le siguió de lejos hasta dentro del patio del sumo sacerdote; y estaba sentado con los alguaciles, calentándose al fuego. 55 Y los principales sacerdotes y todo el concilio buscaban testimonio contra Jesús, para entregarle a la muerte; pero no lo hallaban. 56 Porque muchos decían falso testimonio contra él, mas sus testimonios no concordaban. 57 Entonces levantándose unos, dieron falso testimonio contra él, diciendo: 58 Nosotros le hemos oído decir: Yo derribaré este templo hecho a mano, y en tres días edificaré otro hecho sin mano. 59 Pero ni aun así concordaban en el testimonio. 60 Entonces el sumo sacerdote, levantándose en medio, preguntó a Jesús, diciendo: ¿No respondes nada? ¿Qué testifican estos contra ti? 61 Mas él callaba, y nada respondía. El sumo sacerdote le volvió a preguntar, y le dijo: ¿Eres tú el Cristo, el Hijo del Bendito? 62 Y Jesús le dijo: Yo soy; y veréis al Hijo del Hombre sentado a la diestra del poder de Dios, y viniendo en las nubes del cielo. 63 Entonces el sumo sacerdote, rasgando su vestidura, dijo: ¿Qué más necesidad tenemos de testigos? 64 Habéis oído la blasfemia; ¿qué os parece? Y todos ellos le condenaron, declarándole ser digno de muerte. 65 Y algunos comenzaron a escupirle, y a cubrirle el rostro y a darle de puñetazos, y a decirle: Profetiza. Y los alguaciles le daban de bofetadas.

Pedro niega a Jesús

66 Estando Pedro abajo, en el patio, vino una de las criadas del sumo sacerdote; 67 y cuando vio a Pedro que se calentaba, mirándole, dijo: Tú también estabas con Jesús el nazareno. 68 Mas él negó, diciendo: No le conozco, ni sé lo que dices. Y salió a la entrada; y cantó el gallo. 69 Y la criada, viéndole otra vez, comenzó a decir a los que estaban allí: Este es de ellos. 70 Pero él negó otra vez. Y poco después, los que estaban allí dijeron otra vez a Pedro: Verdaderamente tú eres de ellos; porque eres galileo, y tu manera de hablar es semejante a la de ellos. 71 Entonces él comenzó a maldecir, y a jurar: No conozco a este hombre de quien habláis. 72 Y el gallo cantó la segunda vez. Entonces Pedro se acordó de las palabras que Jesús le había dicho: Antes que el gallo cante dos veces, me negarás tres veces. Y pensando en esto, lloraba.

BIBLIA EN UN AÑO: 2 Reyes 21 – 23

MENSAJE

Muchas personas que asisten a la iglesia habitualmente hoy en día, están simplemente aparentando ser Cristianos. Si examinaras sus vidas realmente, descubrirías que en vez de llevar su cruz para seguir a Jesús de cerca, muchos solo le están siguiendo desde lejos. En el momento en el que las cosas se ponen un poco difíciles, le niegan. Pedro fue un ferviente seguidor de Cristo; él también declaraba abiertamente sus creencias, aún así él era la última persona que uno hubiera esperando que negaría a Cristo. Necesitamos examinar realmente que es lo que ocurrió en ese día en Marcos 14.

"Y Pedro le siguió de lejos hasta dentro del patio del sumo sacerdote; y estaba sentado con los alguaciles, calentándose al fuego." Marcos 14:54

Toma nota de la primera frase en el pasaje anterior – Pedro seguía a Jesús desde lejos. ¿Cómo de cerca estás tú de Jesús ahora? Muchos Cristianos están siguiendo a Jesús desde lejos, por lo tanto le niegan una y otra vez. Pedro se había jactado de lo imposible que era para él negar a Jesús en Marcos 14:27 -31, pero en Marcos 14:54, él seguía a Jesús desde lejos y terminó negándole. ¿Por qué él seguía a Jesús desde lejos? Esto es porque no quería ser asociado con la persecución de Jesucristo. ¿Estás tú también huyendo de la persecución de Jesús? No hablas como un Cristiano en la oficina porque no quieres que nadie te etiquete con la etiqueta de Cristiano. Vas a reuniones de negocios, y aunque el Espíritu Santo te está diciendo que ores antes de que empiece la reunión, ignoras la orden porque no quieres que la gente con la que te estás reuniendo sepa lo seriamente que te tomas a Dios. No predicas el evangelio a aquellos que interactúan contigo diariamente porque no quieres que ellos empiecen a llamarte fanático Cristiano.

Cuando les dejas saber desde el principio de que eres un hijo de Dios, hay asuntos y sugerencias que ellos nunca te presentarán. Por otra parte, si estás siguiendo a Jesús desde lejos, traerán esas tentaciones a ti porque nunca te han conocido como alguien serio con su fe. En la Iglesia, cuando estás en la presencia de Dios y jactándote de que nunca le negarás como Pedro hizo, pregúntate a ti mismo, Cuando salga de aquí, ¿seguiré a Cristo de cerca o le seguiré desde lejos?

PUNTO CLAVE: La única forma en la que no negarás a Jesús es si le estás siguiendo de cerca y todo el mundo a tu alrededor pueda fácilmente asociarte con Él.