Memoriza: « He aquí el día de Jehová viene, terrible, y de indignación y ardor de ira, para convertir la tierra en soledad, y raer de ella a sus pecadores.» Isaías 13:9
Lee: Isaías 13:6 – 11
6 Aullad, porque cerca está el día de Jehová; vendrá como asolamiento del Todopoderoso. 7 Por tanto, toda mano se debilitará, y desfallecerá todo corazón de hombre, 8 y se llenarán de terror; angustias y dolores se apoderarán de ellos; tendrán dolores como mujer de parto; se asombrará cada cual al mirar a su compañero; sus rostros, rostros de llamas.
9 He aquí el día de Jehová viene, terrible, y de indignación y ardor de ira, para convertir la tierra en soledad, y raer de ella a sus pecadores. 10 Por lo cual las estrellas de los cielos y sus luceros no darán su luz; y el sol se oscurecerá al nacer, y la luna no dará su resplandor. 11 Y castigaré al mundo por su maldad, y a los impíos por su iniquidad; y haré que cese la arrogancia de los soberbios, y abatiré la altivez de los fuertes.
BIBLIA EN UN AÑO: Jueces 14 – 16
MENSAJE
"Entonces estarán dos en el campo; el uno será tomado, y el otro será dejado. Dos mujeres estarán moliendo en un molino; la una será tomada, y la otra será dejada." - Mateo 24:40 - 41
En el último día, muchos perderán a sus amigos. Los maridos serán separados de sus esposas. Algunas madres serán separadas de sus hijos. Unos irán al cielo mientras que los otros se quedarán aquí. Esa persona que ha estado predicándote que vivas una vida de santidad ya no estará ahí para predicarte, pues habrá sido arrebatada. Yo tampoco estaré aquí, y ese año será el último año en el que este devocional de los Cielos Abiertos se publicará.
Amado, entrega tu vida a Cristo ahora y vive una vida de santidad para que no te quedes atrás en ese día. Desde ese día, todas las cosas que persigues – dinero, casas, coches, fama, matrimonio y todo lo demás, ya no tendrán relevancia. La única cosa que importará es si irás al cielo con Cristo o te quedarás en la tierra con el Anti-Cristo. Habrá llanto y rechinar de dientes.
"Y castigaré al mundo por su maldad, y a los impíos por su iniquidad; y haré que cese la arrogancia de los soberbios, y abatiré la altivez de los fuertes." - Isaías 13:11
Para aquellos de nosotros que iremos al cielo, el llanto terminará permanentemente ese día (Apocalipsis 21:4). El mundo quizás se esté burlando de nosotros ahora, por vivir una vida de santidad. Quizás parezca que estén disfrutando la vida ahora, pero ese último día se acerca, en el que empezarán las lamentaciones de todo aquel que no se ha rendido al Señorío de Cristo. En ese día, en las partes del mundo donde sea de día, el sol ya no brillará con su luz. Donde sea de noche, la luna se oscurecerá. El castigo de los pecadores empezará en ese momento. Oh, espero que tú no estés aquí para experimentar el castigo que vendrá después del arrebatamiento. Te puedo asegurar que desearás haberle entregado tu vida a Cristo.
Deja a un lado las preocupaciones de este mundo que te estás impidiendo vivir una vida de santidad ahora; ya no importarán en ese día. Oro para que tu llegues al cielo, en el nombre de Jesús.
PUNTO CLAVE: Vigila pues, porque no sabemos la hora en la que vendrá nuestro Señor (Mateo 24:42).