Devocional Cielos Abiertos

POSEYENDO LO QUE TE PERTENECE

Memoriza: «Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo,» Efesios 1:3

Lee: Deuteronomo 28:1 – 14

Bendiciones de la obediencia

(Lv. 26.3-13Dt. 7.12-24)

28 Acontecerá que si oyeres atentamente la voz de Jehová tu Dios, para guardar y poner por obra todos sus mandamientos que yo te prescribo hoy, también Jehová tu Dios te exaltará sobre todas las naciones de la tierra. Y vendrán sobre ti todas estas bendiciones, y te alcanzarán, si oyeres la voz de Jehová tu Dios. Bendito serás tú en la ciudad, y bendito tú en el campo. Bendito el fruto de tu vientre, el fruto de tu tierra, el fruto de tus bestias, la cría de tus vacas y los rebaños de tus ovejas. Benditas serán tu canasta y tu artesa de amasar. Bendito serás en tu entrar, y bendito en tu salir.

Jehová derrotará a tus enemigos que se levantaren contra ti; por un camino saldrán contra ti, y por siete caminos huirán de delante de ti. Jehová te enviará su bendición sobre tus graneros, y sobre todo aquello en que pusieres tu mano; y te bendecirá en la tierra que Jehová tu Dios te da. Te confirmará Jehová por pueblo santo suyo, como te lo ha jurado, cuando guardares los mandamientos de Jehová tu Dios, y anduvieres en sus caminos. 10 Y verán todos los pueblos de la tierra que el nombre de Jehová es invocado sobre ti, y te temerán. 11 Y te hará Jehová sobreabundar en bienes, en el fruto de tu vientre, en el fruto de tu bestia, y en el fruto de tu tierra, en el país que Jehová juró a tus padres que te había de dar. 12 Te abrirá Jehová su buen tesoro, el cielo, para enviar la lluvia a tu tierra en su tiempo, y para bendecir toda obra de tus manos. Y prestarás a muchas naciones, y tú no pedirás prestado. 13 Te pondrá Jehová por cabeza, y no por cola; y estarás encima solamente, y no estarás debajo, si obedecieres los mandamientos de Jehová tu Dios, que yo te ordeno hoy, para que los guardes y cumplas, 14 y si no te apartares de todas las palabras que yo te mando hoy, ni a diestra ni a siniestra, para ir tras dioses ajenos y servirles.

BIBLIA EN UN AÑO: Levítico 11 – 13

MENSAJE

Nuestras posesiones, como hijos de Dios son multifacéticas. Cuando analizamos Génesis 1:26, podemos ver un aspecto de nuestra posesión – el dominio. En otras palabras, es la voluntad de Dios que estemos a cargo o en control. Esto es tan importante que Dios también lo señaló como una de Sus bendiciones para Abraham y sus hijos (Génesis 22:17). Moisés bendijo a los hijos de Israel en el nombre del Señor y dijo en Deuteronomio 28:13;

"Te pondrá Jehová por cabeza, y no por cola; y estarás encima solamente, y no estarás debajo, si obedecieres los mandamientos de Jehová tu Dios, que yo te ordeno hoy, para que los guardes y cumplas, "

¿Por qué tocamos hoy el tema de «Poseyendo lo que te pertenece» cuando una posesión ya está a nuestra disposición? Esto es particularmente un puzzle cuando analizamos Génesis 1:26. La verdad del asunto es que el hombre perdió su posesión por causa del pecado y el diablo, de acuerdo con lo que se registra de la caída en Génesis 3. Así pues, tiene que ser recuperado. Para hacer esto, el hombre necesita a Alguien más poderoso que el diablo. Gloria a Dios, Jesús vino a nuestro rescate. La Biblia dice:

"Porque ya conocéis la gracia de nuestro Señor Jesucristo, que por amor a vosotros se hizo pobre, siendo rico, para que vosotros con su pobreza fueseis enriquecidos."

Para acceder a las bendiciones mencionadas arriba, debes de ser un hijo del Reino. Ser un hijo del reino requiere un verdadero arrepentimiento y una aceptación de Jesucristo como tu Señor y Salvador. Esto te conecta con el la Verdadera Viña, en quien empezarás a llevar el fruto del Espíritu (amor, gozo, paz, paciencia, bondad, gentileza, fe, mansedumbre, templanza) como vemos en Gálatas 5:22- 23 y los frutos de las almas que permanecerán en el Reino de Dios (Juan 15:16).

Este es el camino para poseer lo que nos pertenece (Mateo 6:33) y acceder a una vida eterna (Juan 3:16). Camina en este camino.

PUNTO DE ORACIÓN: Padre, dame la gracia para poseer lo que me pertenece, en el nombre de Jesús.