Memoriza:“ Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable;”
Lee: 2 Corintios 5:18 – 21
18 Y todo esto proviene de Dios, quien nos reconcilió consigo mismo por Cristo, y nos dio el ministerio de la reconciliación;
19 que Dios estaba en Cristo reconciliando consigo al mundo, no tomándoles en cuenta a los hombres sus pecados, y nos encargó a nosotros la palabra de la reconciliación.
20 Así que, somos embajadores en nombre de Cristo, como si Dios rogase por medio de nosotros; os rogamos en nombre de Cristo: Reconciliaos con Dios.
21 Al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él.
BIBLIA EN UN AÑO: Salmos 105 – 107
MENSAJE
Desde el principio de la creación, Dios ha diseñado al hombre para ser Su representante en la tierra. El hombre fue creado para acutar en representación de Dios en la tierra. Génesis 1:26 dice;
" Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra."
El hombre fue aliviado de su tarea como resultado del pecado, y perdió todos los privilegios que podían haber sido suyos fácilmente. Sn embargo, Dios Todopoderoso nos ofrece la salvación a través de Jesucristo, quien dijo en Mateo 11:28 – 30;
"28 Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar. 29 Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas; 30 porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga."
Todos los que respondan a este llamado serán hechos Embajadores de Cristo – representándole en cualquier rincón de la tierra. Esta fue la autoridad que los primeros discípulos tenían y uno de los apóstoles escribió en nuestra lectura Bíblica de hoy.
” Y todo esto proviene de Dios, quien nos reconcilió consigo mismo por Cristo, y nos dio el ministerio de la reconciliación; Así que, somos embajadores en nombre de Cristo, como si Dios rogase por medio de nosotros; os rogamos en nombre de Cristo: Reconciliaos con Dios. “ 1 Corintios 5: 18, 20.
Amado, ¿eres un representante de Cristo o del diablo? De acuerdo con nuestro verículo a memorizar de hoy, tu respuesta al llamdo de Cristo determinará a quien representas. ES bueno ser representante del Dios Altísimo aquí en la tierra; los benficios son innumerables tanto en lo espiritual como en lo físico. Lo que se espera de nosotros es que vivamos de acuerdo con nuestra llamado – no para avergonzar a Aquel que nos llamó, sino para mostrar Su gloria.
Oro para que no pierdas tu llamado, como lo hizo el primer hombre, en el nombre de Jesús.
PUNTO DE ORACIÓN: Padre, por favor, dame la gracia para ser Tu embajador verdadero en todo momento, en el nombre de Jesús.