DEVOCIONAL CIELOS ABIERTOS
Memoriza:«Y vendrán sobre ti todas estas bendiciones, y te alcanzarán, si oyeres la voz de Jehová tu Dios.· Deuteronomio 28:2
Lee: Génesis 27:1 – 4
Jacob obtiene la bendición de Isaac
27 Aconteció que cuando Isaac envejeció, y sus ojos se oscurecieron quedando sin vista, llamó a Esaú su hijo mayor, y le dijo: Hijo mío. Y él respondió: Heme aquí.
2 Y él dijo: He aquí ya soy viejo, no sé el día de mi muerte.
3 Toma, pues, ahora tus armas, tu aljaba y tu arco, y sal al campo y tráeme caza;
4 y hazme un guisado como a mí me gusta, y tráemelo, y comeré, para que yo te bendiga antes que muera.
BIBLIA EN UN AÑO: Mateo 12
MENSAJE
Muchas personas desean ser bendecidas por Dios y el hombre. Pero no han hecho nada para que su deseo sea concedido. Algunos han recibido grandes profecías que eran de hecho ciertas, pero no han sucedido por su falta de acción.
Hay principios que guían a las bendiciones divinas, el primero es que tienes que estar preparado para pasar a la acción. Cuando el Señor le dijo a los hijos de Israel que era el momento, ellos poseyeron la tierra que se les había prometido por tanto tiempo, tuvieron que pasar a la acción primeramente, para conquistar a los habitantes antes de tomar el control de la tierra de la que fluía leche y miel (Josué 1:11 – 15).
En Éxodo 13, antes de que los israelitas pudieran caminar sobre tierra seca en medio del Mar Rojo, tuvieron que moverse hacia delante primero. Esa profecía sobre ti, quizás no suceda hasta que pases a la acción.
En la lectura Bíblica de hoy, Esaú tuvo que cumplir ciertas condiciones antes de poder acceder a la bendición de su padre. La bendición de un padre, ya sea biológica o espiritual es tan poderosa que solo puede ser revertida por Dios; por eso no debes de perderla. Si recibir la bendición es algo tan importante, imagina la implicación de perderla. Para acceder a las bendiciones divinas debes de estar preparado para dar. Proverbios 3:9 – 10 dice;
"Honra a Jehová con tus bienes, Y con las primicias de todos tus frutos; Y serán llenos tus graneros con abundancia, Y tus lagares rebosarán de mosto."
Siempre tienes que tener algo para entregar, no solo a Dios pero también Sus siervos, no hay regalo muy pequeño o muy grande.
Isaías 55:19 dice que Dios siempre dará semilla al sembrador. Una semilla no es para comérsela, sino para sembrarla para que puede traer una cosecha. Siempre que siembres, tendrás cosecha, siempre que des, ciertamente recibirás.
Oro para que en cada momento de tu vida, nunca te falta semilla para sembrar para poder acceder a las bendiciones divinas, en el nombre de Jesús.
PUNTO DE ORACIÓN: Padre dame lo necesario para acceder a las bendiciones divinas en el poderoso nombre de Jesús.