LAS PALABRAS PUEDEN SANAR

Memoriza: «Sea vuestra palabra siempre con gracia, sazonada con sal, para que sepáis cómo debéis responder a cada uno.» Colosenses 4:6

Lee: Juan 8:1 – 11

y Jesús se fue al monte de los Olivos. Y por la mañana volvió al templo, y todo el pueblo vino a él; y sentado él, les enseñaba. Entonces los escribas y los fariseos le trajeron una mujer sorprendida en adulterio; y poniéndola en medio, le dijeron: Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en el acto mismo de adulterio. Y en la ley nos mandó Moisés apedrear a tales mujeres. Tú, pues, ¿qué dices? Mas esto decían tentándole, para poder acusarle. Pero Jesús, inclinado hacia el suelo, escribía en tierra con el dedo. Y como insistieran en preguntarle, se enderezó y les dijo: El que de vosotros esté sin pecado sea el primero en arrojar la piedra contra ella. E inclinándose de nuevo hacia el suelo, siguió escribiendo en tierra. Pero ellos, al oír esto, acusados por su conciencia, salían uno a uno, comenzando desde los más viejos hasta los postreros; y quedó solo Jesús, y la mujer que estaba en medio. 10 Enderezándose Jesús, y no viendo a nadie sino a la mujer, le dijo: Mujer, ¿dónde están los que te acusaban? ¿Ninguno te condenó? 11 Ella dijo: Ninguno, Señor. Entonces Jesús le dijo: Ni yo te condeno; vete, y no peques más.

BIBLIA EN UN AÑO: Salmos 73 – 77

MENSAJE

Los últimos dos días hemos hablado sobre el poder de las palabras; hoy, me centraré en como las palabras pueden sanar.

Como Cristiano, debes de siempre tener gracia con tus palabras (Efesios 4:29). Debes de ser generoso dando cumplidos y diciéndole a la gente palabras de ánimo. Simplemente diciendo osas como, «Me gusta tu corte de pelo», puedes quitar la tristeza y poner una sonrisa en el rostro de alguien. Tus cumplidos deben, sin embargo, ser verdaderos porque Dios castigará a aquellos que adulan a otros con sus palabras (Salmos 12:3)

En Rut 2:1, boz fue descrito como un hombre poderoso y con riquezas. Al contrario de otras personas con riquezas que miraban a sus trabajadores por encima del hombre, y les hablaban mal, Boaz animaba a sus trabajadores con sus palabras, y ellos respondían con complacencia (Rut 2:4). Creo que esto ayudó en parte al éxito del negocio de Boaz. Si tienes un negocio y maldices o hablas mal a tus trabajadores, estás indirectamente maldiciendo el trabajo de tus manos porque ellos son los que están manejándolo para ti.

Nabal, al contrario de Boaz, era un hombre que hablaba palabras negativas. Cuando David envío a sus hombres para preguntarle algo, su respuesta fue terrible. Él habló duramente a los hombres, y si su esposa, Abigaíl, no hubiera intervenido yendo sin su consentimiento para calmar a David con sus palabras, todos en su familia hubieran sido destruidos.

Mientras que las palabras de Nabal avivaron el enfado de David e hicieron y le hicieron juntar a sus hombres para ir en contra de su casa, las palabras de Abigail esetaba sazonadas con sal y evitaron que su familia fuera destruida (1 Samuel 25:1 – 35).

Cuando hablas, ¿qué efecto tienen tus palabras? ¿Destruyen o sanan? Salomón dijo, «La muerte y la vida está en el poder de la lengua…» (Proverbios 18:21)

El Apóstol Pablo, en el versículo a memorizar de hoy, nos dice que nos aseguremos de que nuestro diálogo siempre esté lleno de gracia y sazonado con sal. Sazonar hace que la comida se disfrute más. Una persona cuyo diálogo está bien sazonado siempre atraerá a otros a sí mismo porque la gente va a los lugares donde se sienten apreciados y motivados.

Cuando la mujer que fue encontrada cometiendo adulterio en la lectura Bíblica de hoy, fue llevada ante Jesús, en medio de muchas palabras condenatorias de otras personas, Sus palabras, «Ve y no peques más», la dieron la libertad que necesitaba (Juan 8:11).

Que tus palabras atraigan a los no creyentes a jesús y les muestren Su gracia. No dejes que tus palabras sean la razón por la que la gente rechace el evangelio.

LLAMADA A LA ACCIÓN: Conscientemente, da cumplidos verdaderos y anima a la gente con tus palabras cada día.

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Amén

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Las palabras como instrumento de Gracia Divina

El devocional de hoy completa la serie de tres partes sobre el poder de las palabras, centrándose en su potencial de redención. Mientras que hemos examinado previamente la capacidad destructiva y su papel en las relaciones, ahora exploramos como un diálogo lleno de gracia puede sanar heridas, restaurar la dignidad, y atraer a la gente a Cristo. A través de ejemplos Bíblicos y sabiduría práctica, aprenderemos a sazonar nuestras conversaciones con gracia divina.


1. La anatomía de las Palabras que Sanan

A. Características de un Diálogo lleno de gracia

  1. Da vida (Proverbios 18:21)
    • Construye en vez de destruir
    • Imparte esperanza en vez de condenación
  2. Sazonado con Sal (Colosenses 4:6)
    • Preserva las relaciones
    • Aumenta el sabor espiritual
    • Crea sed por justicia
  3. A tiempo (Proverbios 15:23)
    • La palabra correcta e el momento correcto
    • El tiempo perfecto de Jesús con la mujer adúltera

    B. Modelos Bíblicos de Diálogo que Sana

    1. Boaz: El líder que daba ánimos (Rut 2:1 – 4)
      • Aplicado al lugar de trabajo
        • Se dirigía a los cosechadores con bendición («El SEÑOR sea contigo»)
        • Resultado: Un ambiente de trabajo placentero y favor divino
    2. Abigail: La pacificadora (1 Samuel 25:18 – 35)
      • Resolución de conflicto:
        • Dijo la verdad con humildad
        • Evitó el desastre por medio de palabras sabias
    3. Jesús: el Médico de la Palabra por excelencia (Juan 8:1 – 11)
      • Un acercamiento basado en la restauración:
        • Silenció a los acusadores con sabiduría
        • Habló sobre la identidad antes de instruir («Yo tampoco te condeno»)
        • Le dio una poderosa instrucción («Ve y no peques más»)

    2. Formas Prácticas de hablar con palabras que sanan

    A. En las interacciones diarias

    1. El ratio de cumplidos 3:1
      • Por cada corrección, ofrece tres sinceras afirmaciones
    2. El método G.A.P para las conversaciones difíciles
      • Gracia – Empieza con bondad
      • Atención – Escucha hasta el final
      • Propósito- Habla para edificar
    3. Solución Salina para las almas heridas
      • «Creo en ti»
      • «Dios no ha terminado contigo aún»
      • «Tu historia aún no ha acabado»

      B. En Evangelismo

      1. Evita «Cristianizar»
        • Habla claro sobre la gracia
      2. Sigue el modelo de Jesús
        • A la mujer samaritana: «Yo soy el que habla contigo» (Juan 4:26)
        • A Zaqueo: «Debo estar en tu casa» (Lucas 19:5)
      3. Recuerda:
        • Las palabras duras repelen el evangelio
        • Las palabras con gracia hacen a Cristo atractivo a los demás (Tito 2:10)

        3. El Poder Transformador de Las palabras que Sanan

        A. Impacto Fisiológico

        • Liberan oxitocina (la hormona del vínculo)
        • Reducen el cortisol (la hormona del estrés)
        • Reestructura las vías neuronales para esperanza

        B. Dinámica Espiritual

        1. Poder Creativo
          • Dios declaró la creación a existencia
          • Creamos atmósferas con nuestras palabras
        2. Autoridad sobre las tinieblas
          • Reprende al acusador de los hermanos (Apocalipsis 12:10)
          • Silencia las voces condenatorias
        3. Potencial Profético
          • Invocando el destino
          • Liberando el propósito divino

          Oración para un Diálogo lleno de gracia

          Padre, haz que mi boca sea una fuente de vida hoy. Allí donde he hablado duramente, trae convicción, allí donde me he quedado callado cuando debía de haber animado, trae arrepentimiento. Lléname con tus palabras de gracia y sabiduría. Que toda conversación hoy atraiga a alguien más cerca de Ti, en el nombre de Jesús. Amén.


          Conclusión: Convertirse en un Artesano de las palabras

          1. Examinando cada día
            • Revisa las conversaciones cada noche
          2. Inmersión en las Escrituras
            • Satura tu mente con Salmos y Proverbios
          3. Dependencia del Espíritu Santo
            • Abre mis labios… (Salmos 51:15)

          Desafío Final

          • Desafío de los 30 Días de Diálogo lleno de gracia:
            • Sin palabras negativas sobre otras personas
            • Intencionadamente da ánimos cada día
            • Una conversación evangelizadora cada semana

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