Memoriza: «A Jehová he puesto siempre delante de mí; Porque está a mi diestra, no seré conmovido.» Salmos 16:8
Lee: Génesis 28:10 – 22
Dios se aparece a Jacob en Bet-el
10 Salió, pues, Jacob de Beerseba, y fue a Harán. 11 Y llegó a un cierto lugar, y durmió allí, porque ya el sol se había puesto; y tomó de las piedras de aquel paraje y puso a su cabecera, y se acostó en aquel lugar. 12 Y soñó: y he aquí una escalera que estaba apoyada en tierra, y su extremo tocaba en el cielo; y he aquí ángeles de Dios que subían y descendían por ella. 13 Y he aquí, Jehová estaba en lo alto de ella, el cual dijo: Yo soy Jehová, el Dios de Abraham tu padre, y el Dios de Isaac; la tierra en que estás acostado te la daré a ti y a tu descendencia. 14 Será tu descendencia como el polvo de la tierra, y te extenderás al occidente, al oriente, al norte y al sur; y todas las familias de la tierra serán benditas en ti y en tu simiente. 15 He aquí, yo estoy contigo, y te guardaré por dondequiera que fueres, y volveré a traerte a esta tierra; porque no te dejaré hasta que haya hecho lo que te he dicho. 16 Y despertó Jacob de su sueño, y dijo: Ciertamente Jehová está en este lugar, y yo no lo sabía. 17 Y tuvo miedo, y dijo: ¡Cuán terrible es este lugar! No es otra cosa que casa de Dios, y puerta del cielo.
18 Y se levantó Jacob de mañana, y tomó la piedra que había puesto de cabecera, y la alzó por señal, y derramó aceite encima de ella. 19 Y llamó el nombre de aquel lugar Bet-el,[a] aunque Luz[b] era el nombre de la ciudad primero. 20 E hizo Jacob voto, diciendo: Si fuere Dios conmigo, y me guardare en este viaje en que voy, y me diere pan para comer y vestido para vestir, 21 y si volviere en paz a casa de mi padre, Jehová será mi Dios. 22 Y esta piedra que he puesto por señal, será casa de Dios; y de todo lo que me dieres, el diezmo apartaré para ti.
BIBLIA EN UN AÑO: Números 25 – 26
MENSAJE
« En derredor tendrá dieciocho mil cañas. Y el nombre de la ciudad desde aquel día será Jehová-sama.» – Ezequiel 48:35
Tanto si lo crees como sino, tanto si le sientes como si no, el Señor siempre está. contigo. Los tres hebreos parecían estar solos cuando se enfrentaron al rey, pero cuando les pusieron en el horno de fuego, quedó claro para todo el mundo, que Jesús estaba ahí con ellos (Daniel 3:8 – 30).
Cuando Dios está contigo, nada puede interponerse en tu camino. Hay una historia que me encanta, sobre tres pequeños peces, que eran diferentes, que estaban siendo aterrorizados por una madre tiburón y su bebé en el océano. Un día, ellos hicieron una reunión de oración, e invitaron al Señor a asistir. Cuando el Señor llegó, Él les preguntó cual era el problema, y que querían. El primer pez dijo, «Quiero tener ojos por todo mi cuerpo para poder ver a los tiburones cuando se me acerquen desde cualquier ángulo». El segundo pez dijo, «Señor, dame alas poderosas para poder volar fuera del océano cuando me persigan los tiburones». El Señor les concedió sus peticiones a los dos peces, y cuando miró al último para preguntarle que quería, este. dijo, «Todo lo que quiero es que Tú estés conmigo dondequiera que vaya».
Cuando el Señor se fue, los tiburones volvieron, y el pez con muchos ojos era su primer objetivo, porque parecía muy bonito con todos esos ojos sobre su cuerpo. El pez les vio venir y nadó hacia la playa. Vio un estanque en la playa y saltó. Desafortunadamente, cuando se puso el sol, el estanque se secó y el pez murió. Cuando los tiburones fueron tras el pez con alas, el voló fuera del agua, pero un águila que estaba volando por ahí rápidamente lo agarró y se lo comió. El tercer pez permaneció a salvo, porque siempre que la madre tiburón y su hijo se acercaban, veían la sombra de un hombre siguiéndole, que les daba miedo. El pez que pidió la presencia de Dios, sobrevivió y prosperó en medio del peligro.
La presencia de Dios es tu única garantía en contra de los terrores de la vida. Solamente Él puede mantenerte a salvo. Jehová Sama significa «El Señor está ahí», y cuando Dios está ahí contigo en tu oficina, tu negocio, tu familia, o cualquier otra área de tu vida, nada malo en tu contra prosperará.
PUNTO DE ORACIÓN: Gracias Señor por Tu presencia permanente en mi vida.
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Amén