EL QUE NO HACE ACEPCIÓN DE PERSONAS

Memoriza: «porque no hay acepción de personas para con Dios.» Romanos 2:11

Lee: Isaías 3:10 – 11

10 Decid al justo que le irá bien, porque comerá de los frutos de sus manos. 11 ¡Ay del impío! Mal le irá, porque según las obras de sus manos le será pagado.

BIBLIA EN UN AÑO: Éxodo 24 – 27

MENSAJE

Si Cristo está en ti, tu esperanza es gloria (Colosenses 1:27). No importa quien seas, siempre y cuando tengas a Cristo en ti, puedes esperar la gloria de Dios. La lectura Bíblica de hoy dice que, mientras que al justo le irá bien, al malvado le irá mal. No importa cual sea tu pasado, siempre y cuando hayas aceptado a Cristo como tu Señor y Salvador, y vivas confirme a Su voluntad, ha sido justificado, y todo te irá bien. Aquellos que no han nacido de nuevo, no pueden ser justos; Dios los ve como malvados (Juan 3:18 – 21), y él ha dicho que no les irá bien (Isaías 3:11).

Al principio de cada año, siempre le digo a mis hijos, «Todo te irá bien este año». Se que es así porque Aquel que dijo que todo le irá bien al justo, nunca discrimina. Lo que le dice a uno, se lo dice a todos (Marcos 13:37).

Dios no es un hombre como para mentir; cuando Él dice algo, Él lo hace (Números 23:19). Cuando Él hace una promesa, y tu cumples las condiciones de esa promesa, la recibirás en el momento indicado. La promesa de un mañana glorioso para ti, de acuerdo con con Colosenses 1:27, está condicionada, y la condición es que Cristo debe de estar en ti. Aquellos que se niegan a estar conectados a Jesús, no puede ver Sus promesas cumplidas.

Un hombre me pidió una vez que le dijera su futuro, y yo le contesté, «Eso es fácil, ¿has nacido de nuevo?» Él contestó, «No». Entonces le dije que su futuro sería terrible. Él dijo, «¿Cómo lo sabes? Ni siquiera me conoces, ni sabes mi nombre. Ni siquiera has orado» Entonces le dije, «Eso no es necesario, Isaías 3:11 dice, «¡Ay del impío! Mal le irá.» Entonces él dijo, «¿Y si hubiera dicho que he nacido de nuevo?» Yo le contesté, «Te hubiera dicho que tu mañana irá bien» Él entonces dijo, «¿Y si ahora quiero ser un hijo de Dios?» Yo le contesté, «Tu mañana irá bien.»

Dios no hace acepción de personas (Romanos 2:11); no importa tu pasado, Su palabra es verdadera para todo el mundo.

PUNTO CLAVE: Sin importar tu pasado, puedes estar seguro de un glorioso futuro, si entregas tu vida por completo a Cristo.

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Amén