Devocional Cielos Abiertos

TÓMATE UN DESCANSO

Memoriza: “En lugares de delicados pastos me hará descansar; Junto a aguas de reposo me pastoreará.” Salmos 23:2

Lee: Génesis 2:2 – 3

Y acabó Dios en el día séptimo la obra que hizo; y reposó el día séptimo de toda la obra que hizo. Y bendijo Dios al día séptimo, y lo santificó, porque en él reposó de toda la obra que había hecho en la creación.

BIBLIA EN UN AÑO: Lucas 9 – 10

MENSAJE

Dios descansó al séptimo día de la semana de la creación para darnos ejemplo. Él dijo en Éxodo 23:10 – 11 que incluso la tierra debía cultivarse seis años y dejarla descansar en el séptimo año. Todos necesitamos tomarnos un descanso de vez en cuando para poder refrescarnos lo suficiente para ser efectivos en lo que Él nos ha llamado a hacer.

Muchas personas se sienten destrozadas porque no se toman descansos. Algunas personas han estado trabajando por años sin tomarse ningunas vacaciones. Lo que no entienden es que tomarse un tiempo de descanso ayuda a ser más efectivo cuando vuelves al trabajo. En 1 Reyes 19:1 – 8, Elías acababa de hacer caer fuego del cielo y trajo un avivamiento en la tierra. Entonces, él escuchó que Jezabel quería matarle y huyó para salvar su vida. Para cuando llegó al árbol de enebro, él ya estaba cansado, y en ese estado, él le pidió a Dios que le matara. Dios sabía que él realmente no quería morir; él solo necesitaba un descanso. Dios le hizo dormir y envió a un ángel para que le diera de comer dos veces. Después de descansar y comer bien, él tuvo las fuerzas para continuar por los siguientes 40 días. A veces, la razón por la que te sientes frustrado es que no te has tomado un descanso en mucho tiempo. Simplemente intenta solo dormir y comer por un día y verás la diferencia.

Tomarse descanso no es caro. Si no tienes dinero para viajar o ir a un hotel, puedes ir a la casa de algún miembro de tu familia o cualquier lugar apartado donde sabes que nadie te molestará, y simplemente descansa ahí. Necesitas descansar cada semana y cada año también, especialmente después de periodos extenuantes de trabajo, como Elías hizo en 1 Reyes 18. No importa lo ungido que estés, siempre y cuando sigas en la carne, necesitas tomarte un descanso de vez en cuando. La única razón por la que he podido realizar el Servicio del Espíritu Santo cada mes por casi 40 años es que tomo descansos cuando es necesario. Después de un gran programa que dura por lo menos una semana, me tomo un tiempo para descansar bien. No esperes a que el doctor te obligue a estar en la cama para descansar porque para entonces, será mucho más caro, y no tendrás otra elección más que descansar por más tiempo del que te gustaría.

PUNTO CLAVE: Dios no creó tu cuerpo para trabajar sin descansar. Tómate un descanso de vez en cuando.

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Amén