Memoriza: “Entonces Caleb hizo callar al pueblo delante de Moisés, y dijo: Subamos luego, y tomemos posesión de ella; porque más podremos nosotros que ellos.” Números 13:30
Lee: Marcos 11:12 – 24
Maldición de la higuera estéril
12 Al día siguiente, cuando salieron de Betania, tuvo hambre. 13 Y viendo de lejos una higuera que tenía hojas, fue a ver si tal vez hallaba en ella algo; pero cuando llegó a ella, nada halló sino hojas, pues no era tiempo de higos. 14 Entonces Jesús dijo a la higuera: Nunca jamás coma nadie fruto de ti. Y lo oyeron sus discípulos.
Purificación del templo
15 Vinieron, pues, a Jerusalén; y entrando Jesús en el templo, comenzó a echar fuera a los que vendían y compraban en el templo; y volcó las mesas de los cambistas, y las sillas de los que vendían palomas; 16 y no consentía que nadie atravesase el templo llevando utensilio alguno. 17 Y les enseñaba, diciendo: ¿No está escrito: Mi casa será llamada casa de oración para todas las naciones? Mas vosotros la habéis hecho cueva de ladrones. 18 Y lo oyeron los escribas y los principales sacerdotes, y buscaban cómo matarle; porque le tenían miedo, por cuanto todo el pueblo estaba admirado de su doctrina. 19 Pero al llegar la noche, Jesús salió de la ciudad.
La higuera maldecida se seca
20 Y pasando por la mañana, vieron que la higuera se había secado desde las raíces. 21 Entonces Pedro, acordándose, le dijo: Maestro, mira, la higuera que maldijiste se ha secado. 22 Respondiendo Jesús, les dijo: Tened fe en Dios. 23 Porque de cierto os digo que cualquiera que dijere a este monte: Quítate y échate en el mar, y no dudare en su corazón, sino creyere que será hecho lo que dice, lo que diga le será hecho. 24 Por tanto, os digo que todo lo que pidiereis orando, creed que lo recibiréis, y os vendrá.
BIBLIA EN UN AÑO: Mateo 18 -20
MENSAJE
Continuando con mi enseñanza sobre las categorías de oración, hoy me centraré en las oraciones imposibles. La Biblia dice que algunas cosas son imposibles para el hombre, pero con Dios todo es posible (Mateo 19:26; Lucas 1:37). Si tienes alguna duda sobre esto, simplemente echa un vistazo a la Ciudad de Redención, y sabrás que con Dios todo es posible. Hay edificios en la Ciudad de Redención que fueron construídos en siete días y que han estado en pie unos 40 años ya. La primera escuela secundaria en la ciudad es un edificio de dos plantes que fue construido en 18 días. No uso la ingeniería humana, usa la ingeniería divina porque, con Dios no hay nada imposible.
En el momento en el que Dios escucha de tu boca “no puede hacerse”, quizás nunca se pueda hacer. ESto es porque Números 14:28 dice, “que según habéis hablado a mis oídos, así haré yo con vosotros.” A pesar de la incredulidad de las personas, el propósito de Dios siempre se cumplirá, solo que Él levantará a otra generación que completará el trabajo. En Números 13 – 14, doce espías fueron enviados a Jericó, diez de ellos volvieron y dijeron que no podían tomar la tierra, mientras que solo dos dijeron que podían. Dios se aseguró de que toda la gente que había dicho que no podían tomar la tierra fueran desterrados al desierto, mientras que solo los dos que dijeron que era posible entraron en la tierra. En 2 Reyes 7:1 – 17, Eliseo proclamó un cambio económico que ocurriría en 24 horas, que parecía imposible. Todo el mundo en la habitación se quedó callado excepto un hombre que dijo que incluso si Dios creara ventanas en el cielo, sería imposible. El cambio económico sucedió, pero ese hombre no participó en ello. Nunca digas que algo es imposible, en el momento en el que alguien dice que algo no se puede hacer, por lo que a esa persona respecta, nunca sucederá.
Cuando Jesús dijo en Juan 14:14, “Si algo pidiereis en mi nombre, yo lo haré.” Él no estaba bromeando. Por lo tanto, si yo pido algo que parece imposible, Él me lo dará porque Él no ha puesto ningún límite a lo que yo puedo pedir conforme a Su voluntad (1 Juan 5:14 – 15).
Amado, no expreses duda cuando se trata de Dios. No intentes entender lo que Él puede hacer y cómo él lo hará. Simplemente cree.
PUNTO CLAVE: Cree que con Dios, puede hacerse y será hecho.
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Amén