Memoriza: «El que mora en los cielos se reirá; El Señor se burlará de ellos.» Salmos 2:4
Lee: Salmos 37:12 – 13
12 Maquina el impío contra el justo,
Y cruje contra él sus dientes;
13 El Señor se reirá de él;
Porque ve que viene su día.
BIBLIA EN UN AÑO: Proverbios 18 – 20
MENSAJE
Como Dios está sentado en el cielo, Él controla todo en la tierra porque la tierra está a Sus pies (Isaías 66:1). En Salmos 2:1 -4, la Biblia dice que cuando los enemigos intentan lidiar con el ungido de Dios, Aquel que se sienta en el cielo se reirá. En otras palabras, cuando alguien amenaza a un creyente, Dios se rio de la persona que amenaza. Si alguien dice que no vas a ser promocionado, Aquel que se sienta e el cielo se reirá. Esto es porque la promoción no viene del este ni del oeste, sino que viene de Dios solamente (Salmos 75:6 -7). Si un doctor dice que tu caso no tiene esperanza, Aquel que se sienta en los cielos se reirá porque Él ya ha establecido tu sanidad miles de años atrás por Sus llagas (Isaías 53:5). Si alguien te dice que no tendrás éxito en la vida, Aquel que se sienta en el cielo se reirá porque Deuteronomio 28:13 dice que estarás siempre por encima y no por debajo.
Mientras que Dios se está riendo de toda intención maligna del diablo sore tu vida, tu no debes de estar llorando, en vez de eso deberías de estar alabándole. Jesucristo dijo en Mateo 6:27;
« ¿Y quién de vosotros podrá, por mucho que se afane, añadir a su estatura un codo?»
Tu preocupación no resolverá las situaciones adversas. Cuando Dios se está riendo, debes de reírte tú también. Debes de burlarte de los que se burlan y permanecer firme en la inmutable palabra de Dios, sabiendo sin lugar a dudas que tu caso ya está resuelto en Dios. No llores como la gente que no tiene esperanza; eres un hijo de Rey de reyes. Tu Padre posee la tierra y toda su plenitud (Salmos 24:1), así que no hay nada que necesites que no esté a su alcance.
Filipenses 4:6 dice, «Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias.» Cuando le des a conocer tu petición a Dios, hazlo con acción de gracias. No vengas a Él si no tienes esperanza. Santiago 1:6 – 7 dice que si vienes a Él sin fe, ni siquiera esperes recibir algo de Él. Puesto que Hebreos 11:1 nos dice que la fe es la evidencia de las cosas que no se ven, entonces debes de venir con acción de gracias, sabiendo con toda certeza que tu petición ya ha sido concedida. Este es carácter correcto de un verdadero creyente; él o ella no vive en miedo sino en fe, por la certeza que tiene de lo grande y poderoso que es Dios.
PUNTO CLAVE: Cuando Dios se está riendo de tus enemigos, no debes de temblar delante de ellos. Debes de alabarle a Él y reirte también.
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Amén