Devocional Cielos Abiertos

LAS BENDICIONES DEL PADRE

Memoriza: «Las bendiciones de tu padre Fueron mayores que las bendiciones de mis progenitores; Hasta el término de los collados eternos Serán sobre la cabeza de José, Y sobre la frente del que fue apartado de entre sus hermanos.» Génesis 49:26

Lee: Génesis 27:27 – 40

27 Y Jacob se acercó, y le besó; y olió Isaac el olor de sus vestidos, y le bendijo, diciendo:

Mira, el olor de mi hijo,

Como el olor del campo que Jehová ha bendecido;

28 Dios, pues, te dé del rocío del cielo,

Y de las grosuras de la tierra,

Y abundancia de trigo y de mosto.

29 Sírvante pueblos,

Y naciones se inclinen a ti;

Sé señor de tus hermanos,

Y se inclinen ante ti los hijos de tu madre.

Malditos los que te maldijeren,

Y benditos los que te bendijeren.

30 Y aconteció, luego que Isaac acabó de bendecir a Jacob, y apenas había salido Jacob de delante de Isaac su padre, que Esaú su hermano volvió de cazar. 31 E hizo él también guisados, y se los llevó a su padre, y le dijo: Levántese mi padre, y coma de la caza de su hijo, para que me bendiga. 32 Entonces Isaac su padre le dijo: ¿Quién eres tú? Y él le dijo: Yo soy tu hijo, tu primogénito, Esaú. 33 Y se estremeció Isaac grandemente, y dijo: ¿Quién es el que vino aquí, que trajo caza, y me dio, y comí de todo antes que tú vinieses? Yo le bendije, y será bendito. 34 Cuando Esaú oyó las palabras de su padre, clamó con una muy grande y muy amarga exclamación, y le dijo: Bendíceme también a mí, padre mío. 35 Y él dijo: Vino tu hermano con engaño, y tomó tu bendición. 36 Y Esaú respondió: Bien llamaron su nombre Jacob, pues ya me ha suplantado dos veces: se apoderó de mi primogenitura, y he aquí ahora ha tomado mi bendición. Y dijo: ¿No has guardado bendición para mí? 37 Isaac respondió y dijo a Esaú: He aquí yo le he puesto por señor tuyo, y le he dado por siervos a todos sus hermanos; de trigo y de vino le he provisto; ¿qué, pues, te haré a ti ahora, hijo mío? 38 Y Esaú respondió a su padre: ¿No tienes más que una sola bendición, padre mío? Bendíceme también a mí, padre mío. Y alzó Esaú su voz, y lloró.

39 Entonces Isaac su padre habló y le dijo:

He aquí, será tu habitación en grosuras de la tierra,

Y del rocío de los cielos de arriba;

40 Y por tu espada vivirás, y a tu hermano servirás;

Y sucederá cuando te fortalezcas,

Que descargarás su yugo de tu cerviz.

BIBLIA EN UN AÑO: Salmos 69 – 72

MENSAJE

Un padre tiene tremendo poder sobre la vida y los destino de sus hijos. Un hijo sabio siempre buscará la bendición de su padre (biológico o espiritual). Por eso debes siempre pensar en formas de provocar la bendición de tu padre sobre tu vida. Desafortunadamente, en estos tiempos, la mayoría de la gente busca obtener cosas materiales de sus padres y difícilmente piensan en lo que pueden hacer para hacer que sus padres les bendigan.

Un día, acababa de volver de un viaje, y dos de mis hijos espirituales me dieron la bienvenida. El primero que se me acercó apenas me saludó, el otro llegó justo después y se apresuró en ayudarme con las maletas. Cuando hizo esto, yo de inmediato le dije, «Dios te bendiga». El primer hijo dijo, «Padre, no me has dicho Dios te bendiga a mi » Yo le respondí «¿Qué hiciste tú por mi?. Me viste llevando maletas, pero no me ayudaste» Si quieres que tu padre te bendiga, debes de estar preparado para hacer algo que provoque su bendición.

Una cosa muy importante sobre la bendición de los padres es que es irresistible. Aunque Isaac se dio cuenta d que había bendecido a Jacob en vez de a ESaú, no pudo revertirlo (Génesis 27:33). Esta es la razón por la que debemos de buscar la bendición de nuestro padre de cualquier forma posible.

Una vez que tu padre te bendice, estás bendecido para siempre. Sin embargo, hay varios tipos de bendiciones. Algunas bendiciones vienen del alma, lagunas vienen del corazón y otras de la boca. Cuando Isaac quiso bendecir a Esaú, él le dijo que le preparara su comida favorita, para que después de haber comido, él pudiera bendecirle desde lo más profundo de su alama (Génesis 27:4

Un padre puede bendecir a tres de sus hijos, pero uno seguirá siendo más grande que el resto porque el padre le ama de una forma especial. ¿Cuanto te ama tu padre? ¿Provocas a menudo que él ore por ti, o eres el tipo de persona que provoca su ira a menudo? Algunas personas difícilmente envían dinero a sus padres ancianos, algunos difícilmente les llaman, mientras que otros ni siquiera les visitan. Quizás sean ancianos y frágiles ahora, pero sus bendiciones y maldiciones siguen siendo poderosas. Sea lo que sea que quieras hacer, asegúrate de conseguir la mayor cantidad de bendiciones posibles de tu padre antes de que se muera.

LLAMADA A LA ACCIÓN: Haz algo por tu padre hoy que provoque su bendición sobre ti. Si eres un padre, llama a tus hijos y bendíceles desde lo más profundo de tu alma.

COMPARTE EL DEVOCIONAL
Comparte el Devocional de los Cielos Abiertos, en tus redes sociales. Al hacerlo, que el Cielo honre todas tus peticiones, incluidas las que aún están pendientes, con respuestas divinas desde lo alto, en el poderoso nombre de nuestro Señor Jesucristo.

Amén