Memoriza: «Castiga a tu hijo en tanto que hay esperanza; Mas no se apresure tu alma para destruirlo.» Proverbios 19:18
Lee: Juan 9:4
4 Me es necesario hacer las obras del que me envió, entre tanto que el día dura; la noche viene, cuando nadie puede trabajar.
MENSAJE
Una bendición que recibí como joven fue tener una madre que me presionaba duro para que avanzara. Recuerdo que ella me enviaba a muchas tareas y no toleraba ninguna queja. Siempre que volvió de una tarea, decía, «Adejare, siempre que llames a una persona, 200 te responderán». Esta oración fue un factor que me motivaba a hacer todo por mi madre. Para la gloria de Dios, las oraciones de mi madre están siendo contestadas hoy.
Querido hijo, si tus padres te dan tareas, hazlas con gozo. Es para tu propio interés el cooperar con ellos, especialmente si ellos han nacido de nuevo y están llenos del Espíritu Santo. Sin embargo, si tu no tienes este tipo apoyo en tu hogar, tienes que avanzar por ti mismo. Incluso si eres de una familia rica, la riqueza no tiene que terminar con tu generación, debe de crecer y transcender a tus hijos y las generaciones después de ti. Por lo tanto, no puedes ser un vago: trabaja duro. Ponte metas conforme a la palabra de Dios, para ti mismo, sobrepasa esas metas, y sigue mejorando.
PUNTO DE ORACIÓN: Padre, por favor, líbrame de la pereza, en el nombre de Jesús.