Memoriza: «Envió su palabra, y los sanó, Y los libró de su ruina.» Salmos 107:20
Lee: Jeremías 30:17 – 20
17 Mas yo haré venir sanidad para ti, y sanaré tus heridas, dice Jehová; porque desechada te llamaron, diciendo: Esta es Sion, de la que nadie se acuerda.
18 Así ha dicho Jehová: He aquí yo hago volver los cautivos de las tiendas de Jacob, y de sus tiendas tendré misericordia, y la ciudad será edificada sobre su colina, y el templo será asentado según su forma. 19 Y saldrá de ellos acción de gracias, y voz de nación que está en regocijo, y los multiplicaré, y no serán disminuidos; los multiplicaré, y no serán menoscabados. 20 Y serán sus hijos como antes, y su congregación delante de mí será confirmada; y castigaré a todos sus opresores.
BIBLIA EN UN AÑO: Jueces 11 – 13
MENSAJE
Cuando lees la declaración de la Misión en Lucas 4:18 – 19, ves que Él vino a predicar liberación a los cautivos. En otras palabras – Jesucristo es el que libera a los cautivos. En marcos 5:1 – 15, Dios envió la Palabra a los gadarenos para una sola tarea: liberar al hombre que había estado poseído por demonios.
Siempre que la palabra de Dios entra, la luz entra en ese lugar en ese lugar también, y la oscuridad se desvanece. Salmos 119:139 dice, «La exposición de tus palabras alumbra; Hace entender a los simples.» Toda forma de oscuridad en tu vida se desvanecerá al leer este devocional, en el nombre de Jesús.
En Daniel 5:5 – 30, cuando Besazar estaba siendo consumido por el orgullo, Dios envió Su palabra en forma de sueño para librarle de toda forma de orgullo en su corazón. Desafortunadamente, él no escuchó, así que al final sufrió las consecuencias del orgullo al ser asesinado esa misma noche.
Muchas veces, los Cristianos empiezan a involucrarse en algo que les destruirá. Cuando Dios decide salvarlos de aquella destrucción, Él les envía Su palabra. La palabra de Dios puede venir a través de un sermón, un amigo piadoso, la Biblia o incluso directamente del Espíritu Santo. Cuando esa palabra viene, si la persona es sabia, dejará aquella cosa de la que Dios le está intentando salvar.
Se que hay mucha gente que obtiene esa palabra de parte de Dios que puede liberarlos de su destrucción, pero no escuchan y al final son destruidos. No permitas que ese sea tu caso.
¿Te ha estado advirtiendo el Señor que desista de algo en particular? ¿Te ha dado algunas instrucciones y aún no has obedecido? ¿Has estado rechazando el llamado para que entregues tu vida a Jesucristo? Amado, hacer caso a la palabra de Dios trae salvación y desobedecerle a Él nos lleva a la destrucción. Elige sabiamente.
PUNTO DE ORACIÓN: Padre, por favor, envía Tu palabra para mi liberación ahora, en el nombre de Jesús.