MEMORIZA: «porque no hay acepción de personas para con Dios.» ROMANOS 2:11
LEE: MATEO 8:5 – 13
Jesús sana al siervo de un centurión
5 Entrando Jesús en Capernaum, vino a él un centurión, rogándole, 6 y diciendo: Señor, mi criado está postrado en casa, paralítico, gravemente atormentado. 7 Y Jesús le dijo: Yo iré y le sanaré. 8 Respondió el centurión y dijo: Señor, no soy digno de que entres bajo mi techo; solamente di la palabra, y mi criado sanará. 9 Porque también yo soy hombre bajo autoridad, y tengo bajo mis órdenes soldados; y digo a este: Ve, y va; y al otro: Ven, y viene; y a mi siervo: Haz esto, y lo hace. 10 Al oírlo Jesús, se maravilló, y dijo a los que le seguían: De cierto os digo, que ni aun en Israel he hallado tanta fe. 11 Y os digo que vendrán muchos del oriente y del occidente, y se sentarán con Abraham e Isaac y Jacob en el reino de los cielos; 12 mas los hijos del reino serán echados a las tinieblas de afuera; allí será el lloro y el crujir de dientes. 13 Entonces Jesús dijo al centurión: Ve, y como creíste, te sea hecho. Y su criado fue sanado en aquella misma hora.
BIBLIA EN UN AÑO: EZEQUIEL 13 – 15
MENSAJE
Dios no hace acepción de personas (Hechos 10:34); cualquier cosa que Él haya hecho por alguien antes; puede hacerlo por ti también. Por ejemplo, en 1 Reyes 17:8 – 16, había una viuda que solo tenía una comida más. Dios la visitó y al final esa comida duró otros tres años.
En 2 Reyes 4:1 – 7, había otra viuda que solo tenía una vasija de aceite. El Señor se movió en su situación, y el aceite siguió multiplicándose hasta que hubo suficiente para vender y pagar todas sus deudas y vivir con lo que le sobró por el resto de su vida. Si has visto a Dios hacer algo que deseas por otra persona, toma eso como una seguridad de que Él puede hacer lo mismo por ti. Cuando lees en las Escrituras sobre un milagro que tú deseas, regocíjate porque tu milagro está de camino.
Siempre y cuando sean Sus hijos, Dios no es parcial con nadie o con ningún tipo de persona; todo lo que le importa es que tu creas, porque todos es posible para aquellos que creen (Marcos 9:23). Dios es Dios de princpios, y cualquier que sigue Sus principios y tiene fe en Él experimentará Su bondad y poder.
Jesús no pudo hacer muchas obras en Su ciudad natal, por causa de la incredulidad de la gente (Mateo 13:58). Aunque eran Su propia gente, como no tenían fe, no pudieron recibir los milagros. La incredulidad cerró las puertas de los milagros para ellos, y Jesús que tenía el Espíritu Santo sin medida (Juan 3:34), solo pudo sanar a unos pocos enfermos (Marcos 6:5). No importa lo cerca que pienses que estás de Dios, si albergas incredulidad; puedes limitar lo que Él puede hacer en tu vida y a través de ti.
Cuando alguien tiene fe, sin importar la nacionalidad de la persona, sus habilidades o estatus; esa persona experimentará grandes milagros. Cuando Jesús estaba en la tierra, mientras que algunos judíos estaban muriendo en sus enfermedades por causa de su incredulidad, algunos gentiles estaban recibiendo milagros asombrosos. El centurión de la lectura Bíblica de hoy es un ejemplo de un gentil cuya fe atrajo milagros. Él entendió que la distancia no es una barrera cuando la fe está presente, y Jesús se maravilló de su gran fe.
Si tienes fe en Dios sobre un milagro del que has escuchado o leído, Dios es capaz de replicar el mismo milagro en tu vida, no importa lo terrible que sea tu situación, los obstáculos a tu alrededor; si crees, verás la gloria de Dios actuando.
PUNTO CLAVE: Dios no hace acepción de personas. Él solo respeta y responde a Sus principios y nuestra fe.
SIGUE LEYENDO Y PROFUNDIZA EN EL DEVOCIONAL DE HOY
MEMORIZA: Romanos 2:11
«porque no hay acepción de personas para con Dios.»
Este versículo declara la imparcialidad de Dios – Su poder fluye para todos los que cumplen con Sus condiciones, sin importar su estatus o su pasado.
LECTURA BÍBLICA: Mateo 8:5-13
Este pasaje revela tres principios de fe:
- v.8: Reconocimiento de autoridad (solo declara la palabra)
- v.10: Su fe asombró a Jesús (gran fe)
- v.13: La irrelevancia de la distancia (… y como creíste sea hecho)
La Fe que Accede al Poder de Dios
La enseñanza del Pastor Adeboye revela cuatro claves para experimentar milagros:
1. El modelo de la viuda
La viuda de 1 Reyes 17 | La viuda de 2 Reyes 4 | Tu milagro |
---|---|---|
Su última cena se convirtió en 3 años de suministro ininterrumpido. | El último aceite que tenía se convirtió en riqueza para el resto de su vida | Tu «último» se convierte en «primicia» de tu abundancia |
Requirió obediencia (v.13) | Requirió acción (v.3-4) | Requiere dar un paso específico |
Aplicación moderna
- ¿Crisis financiera? – Clama Filipenses 4:19
- ¿Fallos de salud? – Mantente firme en 1 Pedro 2:24
2. La advertencia del Nazareno (Mateo 13:58)
- Realidad trágica
- Jesús no pudo (no porque no quisiera) hacer milagros
- La incredulidad deshabilitó el poder divino
- Auto revisión
- ¿Mis duas están limitando a Dios?
- ¿Pienso en secreto «Él ayudó a otros pero no me ayudará a mi»?
3. La fórmula de la fe del Centurión
- Autoridad reconocida (v.8)
- Entendió el poder ilimitado de Jesús
- Trascendiendo la tradición (v.9)
- Como gentil, accedió al Mesías judío
- Declaró fe (v.8)
- Declara la palabra solamente
4. La promesa de «Sin favoritismos»
- Para todo el mundo:
- El mismo Dios que:
- Partió el Mar Rojo (Éxodo 14)
- Sanó el cáncer (El testimonio del Pastor Adeboye)
- Lo hará por ti si crees (Marcos 9:23)
- El mismo Dios que:
Cómo activar tu milagro
- El proceso de fe de 3 pasos
- Identifica tu «aceite de la viuda»
- ¿Qué es lo poco que tienes? (¿tiempo, habilidades, una pequeña cantidad de dinero?)
- Obedece especíicamente
- Como la orden de reunir vasijas (2 Reyes 4:3)
- Espera abundancia
- De acuerdo con tu fe (Mateo 9:29)
- Identifica tu «aceite de la viuda»
- Destruye las fortalezas de incredulidad
- Renuncia
- A la mentira de «Dios ayudó a otros pero no a mi»
- Reemplázala con:
- «Si Él lo hizo por ellos, Él lo hará por mi! (Hechos 10:34)
- Renuncia
- Declara como el Centurión
- Ora: «Señor, no necesito que vengas – solo declara la palabra»
- Confiesa cada día: Mi milagro hay está hecho en el espíritu – ahora manifiéstate
Oración por fe que produce cambios
«Padre, aplasta toda mentalidad de nazareno en mi. Dame la fe del Centurión que hace que Te asombres. Ahí donde Te he visto moverte por otros, agita un hambre santa por mi propio milagro. Que mi historia se convierta en el impulsor de la fe de otra persona, en el nombre de Jesús.»
Pasos de Acción
- Crea un «Mapa de milagros»
- Enumera 3 milagros que Dios hizo por personas de la Biblia u otras personas.
- Escribe tu nombre al lado de cada uno de los milagros, con la fecha de hoy
- Ayuno de declaraciones de duda
- 3 días sin decir «no puedo» «imposible» o «pero…»
- Activa tu «aceite»
- Toma tu «pequeño» (tiempo, talento, tesoro) y:
- Ora por ello
- Ponlo en acción (como las viudas)
- Toma tu «pequeño» (tiempo, talento, tesoro) y:
Conclusión: Tu turno para milagros
El mensaje del Pastor Adeboye resuena: El curriculum de Dios no está completo hasta que replica el milagro de otros en TU vida.
«El mismo Dios que alimentó a las viudas y maravilló a un centurión espera escribir TU historia de fe – ¿le cederás el bolígrafo?»
COMPARTE EL DEVOCIONAL
Comparte el Devocional de los Cielos Abiertos, en tus redes sociales. Al hacerlo, que el Cielo honre todas tus peticiones, incluidas las que aún están pendientes, con respuestas divinas desde lo alto, en el poderoso nombre de nuestro Señor Jesucristo.
Amén