MEMORIZA: «ijo mío, si los pecadores te quisieren engañar, No consientas.» PROVERBIOS 1:10
LEE: GÉNESIS 39:6 – 10
6 Y dejó todo lo que tenía en mano de José, y con él no se preocupaba de cosa alguna sino del pan que comía. Y era José de hermoso semblante y bella presencia.
7 Aconteció después de esto, que la mujer de su amo puso sus ojos en José, y dijo: Duerme conmigo. 8 Y él no quiso, y dijo a la mujer de su amo: He aquí que mi señor no se preocupa conmigo de lo que hay en casa, y ha puesto en mi mano todo lo que tiene. 9 No hay otro mayor que yo en esta casa, y ninguna cosa me ha reservado sino a ti, por cuanto tú eres su mujer; ¿cómo, pues, haría yo este grande mal, y pecaría contra Dios? 10 Hablando ella a José cada día, y no escuchándola él para acostarse al lado de ella, para estar con ella,
BIBLIA EN UN AÑO: 1 Crónicas 5:18-6:81 Hechos 26:1-32
MENSAJE
Una de mis hijas le dijo a sus amigas en una iglesia de jovenes un domingo, «Cuando Dios prometió enviarte ayudadores de tu destino, Él no quiso decir personas más mayores que tu y con dinero»
Tristemente, algunas chicas y chicos hoy en día, consideran el salir con un hombre o mujer casado y con éxito, como una forma de salir de la pobreza. Quiero que sepas que el libre albedrío que Dios le dio al hombre, puede a veces ser usado como una trampa por el enemigo, que conduzca a la persona a una atadura y a la destrucción eterna. Si estás saliendo con un hombre o una mujer casada, te suplico en el nombre de Jesús que acabes con eso ahora, porque si no lo haces, esa relación solo te conducirá a tu destrucción.
A menudo le decimos a las chicas jovenes en nuestros centros de rehabilitación, que las consecuencias espirituales de las relaciones prematrimoniales son mucho mayores que el placer efímero que puedan dar. José podía haber visto a la mujer de Potifar como una oportunidad para la libertad y la prosperidad, pero él consideró las relaciones fuera del matrimonio como una gran maldad y pecado en contra de Dios.
Ninguna persona malvada o pecador llegará al cielo. Si estás luchando con la lujuria sexual, por favor, corre hacia Jesús hoy, y pídele que te ayude a superarlo. También, si estás metido en relaciones sexuales fuera del matrimonio, o estás saliendo con una persona casada, ponle fin ahora.
PUNTO CLAVE: Las relaciones sexuales fuera del matrimonio son un gran pecado y un acto de maldad delante de Dios.
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Amén