Memoriza: «El corazón apacible es vida de la carne; Mas la envidia es carcoma de los huesos.» Proverbios 14:30
Lee: Gálatas 5:19 – 21
19 Y manifiestas son las obras de la carne, que son: adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia, 20 idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones, herejías, 21 envidias, homicidios, borracheras, orgías, y cosas semejantes a estas; acerca de las cuales os amonesto, como ya os lo he dicho antes, que los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios.
BIBLIA EN UN AÑO: Deuteronomio 28:1-68, Lucas 11:14-36
MENSAJE
La envidia envenena y habre el corazón a muchas cosas malignas. Cualquiera que permite que la envidia entre en su corazón, está a solo unos pasos de albergar muchas otras maldades. Caín no quiso matar a su hermano hasta que la envidia entró en su corazón. Ellos debieron de estar muy unidos, pero el día en el que la envidia se metió en su corazón, abrió la puerta al pensamiento de matar a su hermano.
Si a alguien le va mejor que a ti en la tu clase, tu iglesia, o en cualquier sitio en el que te encuentres, no le envidies; en vez de eso, alégrate con la persona y aprende de él o ella. Santiago 3:16 dice: «Porque donde hay celos y contención, allí hay perturbación y toda obra perversa.» Esto significa que está asociada con la lucha; donde coexisten amas, siempre hay maldad. Esta es la razón por la que no debes permitir que ningún sentimiento de envidia se quede y haga raíces en tu corazón. en el momento en el que te veas a ti mismo sintiendo envidia de otra persona, trabaja en tu mente para repeler y echar fuera ese sentimiento, reemplazándolo con gozo.
Si siempre tienes envidia de otras personas, puedes pedirle a Dios que te ayude. En vez de tener envidia de alguien y caer en la trampa del diablo, ora por la persona.
PUNTO CLAVE: Protege tu corazón en contra del veneno llamado envidia; porque conduce a la destrucción.
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Amén