Memoriza: «Y saliendo él a los manantiales de las aguas, echó dentro la sal, y dijo: Así ha dicho Jehová: Yo sané estas aguas, y no habrá más en ellas muerte ni enfermedad.» 2 Reyes 2:21
Lee: Génesis 21:1 – 2
Nacimiento de Isaac
21 Visitó Jehová a Sara, como había dicho, e hizo Jehová con Sara como había hablado. 2 Y Sara concibió y dio a Abraham un hijo en su vejez, en el tiempo que Dios le había dicho.
BIBLIA EN UN AÑO: Jueces 11 – 13
MENSAJE
En Génesis 1:28, Dios ordenó al hombre que fuera fructífero y se multiplicara. Un útero estéril no le complace; por eso en Génesis 18:9 – 14, cuando Él le dijo a Sara que daría a luz un bebé y ella respondió riéndose. él dijo, «¿Acaso hay algo demasiado difícil para mi?» Si estás experimentando cualquier forma de esterilidad en tu vida, se convertirá en una cosa del pasado, en el nombre de Jesús.
Estaba visitando los Estados Unidos, y uno de mis amigos insistió en que fuera a su casa a cenar. Acordamos tener una cena tranquila, sin embargo, cuando llegué a su casa, me encontré con otras cuatro mujeres además de su esposa. Entonces le dije, «pensaba que habíamos acordado que ésta sería una cena tranquila.» Él respondió, «Han venido a ayudar a mi esposa a cocinar.» Me preguntaba si la comida que íbamos a comer necesitaba a cinco mujeres para prepararla, pero no sabía que ellas tenían un plan.
Me comí la comida y después me fui, las cuatro mujeres que estaban de visita se turnaron para sentarse en la silla en la que me había sentado, porque ellas confiaban en Dios para tener un bebé. Al año siguiente, cuando estaba de vuelta en Estados Unidos, tres mujeres cargaban a sus hijos, mientras que la cuarta tenía seis meses de embarazo. Si estás leyendo esto y has estado esperando en Dios por un bebé, extiendo la unción a dondequiera que estés ahora mismo, y si lo crees, en nueve meses, recibirás tu milagro.
En otra ocasión, decidí usar el baño mientras que el. coro estaba ministrando durante el Servicio del Espíritu Santo en Kaduna, Nigeria. Un ujier, que estaba de pie cerca de la puerta, me saludó y le di la mano. Después de que yo entrar en el baño, él empezó a regocijarse, y emocionado fue a decirle a los otros ujieres, «Me ha dado la mano!» Cuando salí del baño, habían como otros seis ujieres afuera de pie. Le di la mano a todos ellos; por lo tanto, el ujier que fue a llamar a los otros recibió un segundo apretón de manos. Cuando éste llegó a su casa se lo dijo a su esposa, que había sido estéril por años. Nueve meses después, llegó su bebé.
La esterilidad no es la voluntad de Dios, y Él ha dicho en Su palabra que ninguno será estéril en la tierra. (Éxodo 23:26). Decreto un fin a cualquier forma de esterilidad que pueda existir en tu vida, en el nombre de Jesús.
PUNTO DE ORACIÓN: Padre, Tu palabra dice que ninguno será estéril en la tierra, por lo tanto, decreto que daré fruto en todos los aspectos de mi vida, en el nombre de Jesús.
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Amén