Memoriza: «E inmediatamente el padre del muchacho clamó y dijo: Creo; ayuda mi incredulidad.» Marcos 9:24
Lee: Ezequiel 37:1 – 14
El valle de los huesos secos
37 La mano de Jehová vino sobre mí, y me llevó en el Espíritu de Jehová, y me puso en medio de un valle que estaba lleno de huesos. 2 Y me hizo pasar cerca de ellos por todo en derredor; y he aquí que eran muchísimos sobre la faz del campo, y por cierto secos en gran manera. 3 Y me dijo: Hijo de hombre, ¿vivirán estos huesos? Y dije: Señor Jehová, tú lo sabes. 4 Me dijo entonces: Profetiza sobre estos huesos, y diles: Huesos secos, oíd palabra de Jehová. 5 Así ha dicho Jehová el Señor a estos huesos: He aquí, yo hago entrar espíritu en vosotros, y viviréis. 6 Y pondré tendones sobre vosotros, y haré subir sobre vosotros carne, y os cubriré de piel, y pondré en vosotros espíritu, y viviréis; y sabréis que yo soy Jehová.
7 Profeticé, pues, como me fue mandado; y hubo un ruido mientras yo profetizaba, y he aquí un temblor; y los huesos se juntaron cada hueso con su hueso. 8 Y miré, y he aquí tendones sobre ellos, y la carne subió, y la piel cubrió por encima de ellos; pero no había en ellos espíritu. 9 Y me dijo: Profetiza al espíritu, profetiza, hijo de hombre, y di al espíritu: Así ha dicho Jehová el Señor: Espíritu, ven de los cuatro vientos, y sopla sobre estos muertos, y vivirán. 10 Y profeticé como me había mandado, y entró espíritu en ellos, y vivieron, y estuvieron sobre sus pies; un ejército grande en extremo.
11 Me dijo luego: Hijo de hombre, todos estos huesos son la casa de Israel. He aquí, ellos dicen: Nuestros huesos se secaron, y pereció nuestra esperanza, y somos del todo destruidos. 12 Por tanto, profetiza, y diles: Así ha dicho Jehová el Señor: He aquí yo abro vuestros sepulcros, pueblo mío, y os haré subir de vuestras sepulturas, y os traeré a la tierra de Israel. 13 Y sabréis que yo soy Jehová, cuando abra vuestros sepulcros, y os saque de vuestras sepulturas, pueblo mío. 14 Y pondré mi Espíritu en vosotros, y viviréis, y os haré reposar sobre vuestra tierra; y sabréis que yo Jehová hablé, y lo hice, dice Jehová.
BIBLIA EN UN AÑO: Josué 1 – 4
MENSAJE
En la lectura Bíblica de hoy, Ezequiel se encontró en un valle lleno de huesos secos. Cuando Dios le preguntó, «¿Pueden vivir estos huesos?» El profeta, considerando la situación que parecía imposible ante sus ojos, contestó, «Señor, solo Tú lo sabes». En otras palabras, él estaba diciendo, «Esto está por encima de mi fe». Dios le pidió que profetizara, y al hacerlo, los huesos secos volvieron a la vida.
La mayoría de ministros de Dios saben que Él puede hacer todas las cosas. Sin embargo, a veces, la fe de incluso los ministros más remarcables, puede tambalearse terriblemente. A veces, Dios me pide hacer algo, y a pesar de mi fe en Él, yo digo, «Padre, esto está por encima de fe.» Él me pide que profetice de todas formas, y yo simplemente obedezco y le dejo a Él la tarea de que se cumpla.
Cuando escuchas a un ministro de Dios profetizas, y está por encima de tu fe, por favor, no hables en contra de la profecía. Incluso si no crees la profecía, controla tu boca para no hablar en contra de ella, porque las consecuencias pueden ser severas. En 2 Reyes 7:19 – 20, un alto oficial del gobierno dijo que era imposible que la profecía de Eliseo se cumpliera; él vio la profecía cumplirse, pero murió antes de que pudiera formar parte de ella.
En Marcos 9:14- 27, los discípulos de Jesús no fueron capaces de liberar al chico que estaba poseído por el demonio, y su padre había perdido toda esperanza. Cuando Jesús llegó a la escena, la petición de compasión del padre del chico estaba llena de duda. Sé esto porque Jesús dijo, «Si puedes creer, todas las cosas son posibles para aquellos que creen» En vez de profundizar más en su incredulidad, el hombre clamó «Señor, yo creo, ayuda a mi incredulidad», y recibió su milagro.
Cuando las situaciones están por encima de tu fe, clama a Dios para que te ayude a creer. Él puede aumentar tu fe para ayudarte a cooperar con Él para hacer realidad lo imposible. No obstaculices tu milagro por culpa de tu incredulidad. Dios quiere que estés dispuesto a hacer lo que sea necesario que Él te pida, como los siervos en las bodas de Caná (Juan 2:5 – 8)
Cuando Dios trae a tu vida, situaciones que están por encima de tu fe, Él quiere glorificar Su nombre. En esos momentos, no se trata de lo que tu fe pueda hacer, sino lo que Dios puede hacer con tu obediencia y cualquier medida de fe que tengas.
PUNTO CLAVE: Cuando la situación está por encima de tu fe, busca a Dios y haz lo que Él te pida.
COMPARTE EL DEVOCIONAL
Comparte el Devocional de los Cielos Abiertos, en tus redes sociales. Al hacerlo, que el Cielo honre todas tus peticiones, incluidas las que aún están pendientes, con respuestas divinas desde lo alto, en el poderoso nombre de nuestro Señor Jesucristo.
Amén