Memoriza: «Porque la vida de la carne en la sangre está, y yo os la he dado para hacer expiación sobre el altar por vuestras almas; y la misma sangre hará expiación de la persona.» Levíticos 17:11
Lee: Hebreos 12:24
24 a Jesús el Mediador del nuevo pacto, y a la sangre rociada que habla mejor que la de Abel.
BIBLIA EN UN AÑO: Levítico 13:1-59, Marcos 6:1-29
MENSAJE
La sangre es tan sagrada que la Biblia dice que nadie que cualquiera que derrama sangre, verá su sangre derramada también (Génesis 9:6). en las Escrituras, la primera vez que vemos a Dios enfadarse con alguien que derramó la sangre de otra persona es en Génesis 4, donde Caín mató a su hermano, Abel. Dios le dijo a Caín que la tierra que había aceptado la sangre de su hermano, le había maldecido (Génesis 4:10 – 11).
El carácter sagrado de la sangre también puede verse en el versículo a memorizar de hoy. La vida de la carne está en la sangre, y por eso la sangre de Jesús puede expiar nuestros pecados y redimirnos de la condenación eterna que le espera a los pecadores.
Muchos jovenes han mostrado una total indiferencia por el carácter sagrado de la sangre, por medio del aborto; Dios no se complace con esos jovenes. A parte del peligro de muerte durante y después de este acto; también existe el peligro del infierno.
No juegues con fuego No te involucres en ningún pecado que pueda hacer que consideres el aborto como una opción. Si eres una joven que ya se ha quedado embarazada por error, o un chico que ya ha dejado a una chica embarazada por error, no consideres el aborto como una opción, en vez de eso, busca dirección de una persona mayor que sea conocida por ser un buen Cristiano. Si ya te has cometido aborto, pídele a Dios que te perdone, busca el consejo piadoso y deja atrás el pecado.
PUNTO CLAVE: Nunca consideres el aborto como una opción.
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Amén