Memoriza: “ Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús.”
Lee: Lucas 11:2
2 Y les dijo: Cuando oréis, decid: Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre. Venga tu reino. Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra.
Lee: Salmos 103:1 – 4
Alabanza por las bendiciones de Dios
Salmo de David.
103 Bendice, alma mía, a Jehová,
Y bendiga todo mi ser su santo nombre.
2 Bendice, alma mía, a Jehová,
Y no olvides ninguno de sus beneficios.
3 Él es quien perdona todas tus iniquidades,
El que sana todas tus dolencias;
4 El que rescata del hoyo tu vida,
El que te corona de favores y misericordias;
BIBLIA EN UN AÑO: Nehemías 9:39; 1 Corintios 9:19-10:13
MENSAJE
Los últimos dos días, he estado enseñando los diferentes aspectos de la oración. Hoy, me centraré en la acción de gracias.
¿Qué es la acción de gracias? La acción de gracias tiene que ver con reconocer lo que Dios ha hecho por ti. Esto es una actividad personal, y una de las formas de dar gracias a Dios de forma efectiva, es tener un diario de apreciación. Muchas personas tienen diarios donde escriben las cosas malas que les ha pasado, pero no escriben las cosas buenas que Dios ha hecho por ellos. Quiero animarte a que tengas un registro de las batallas que Dios ha luchado por ti, las respuestas a tus oraciones, e incluso las bendiciones repentinas que Él ha depositado en tu vida. De esta forma, nunca te quedarás sin cosas por las que dar gracias.
Personalmente, siempre tengo mucho que decir en la acción de gracias. Empiezo por mis humildes comienzos hasta llegar a donde estoy. Créeme, a veces tengo que forzarme a mi mismo para para para que pueda pasar a otros aspectos de la oración. Así es como paso horas y horas en el lugar de oración.
PUNTO CLAVE: Consigue un diario de apreciación hoy y empieza a escribir lo que Dios ha hecho por ti en el pasado.
COMPARTE EL DEVOCIONAL
Comparte el Devocional de los Cielos Abiertos, en tus redes sociales. Al hacerlo, que el Cielo honre todas tus peticiones, incluidas las que aún están pendientes, con respuestas divinas desde lo alto, en el poderoso nombre de nuestro Señor Jesucristo.
Amén