Memoriza: “Y las manos de Moisés se cansaban; por lo que tomaron una piedra, y la pusieron debajo de él, y se sentó sobre ella; y Aarón y Hur sostenían sus manos, el uno de un lado y el otro de otro; así hubo en sus manos firmeza hasta que se puso el sol.” Éxodo 17:12
Lee: Éxodo 17:8 – 13
Guerra con Amalec
8 Entonces vino Amalec y peleó contra Israel en Refidim. 9 Y dijo Moisés a Josué: Escógenos varones, y sal a pelear contra Amalec; mañana yo estaré sobre la cumbre del collado, y la vara de Dios en mi mano. 10 E hizo Josué como le dijo Moisés, peleando contra Amalec; y Moisés y Aarón y Hur subieron a la cumbre del collado. 11 Y sucedía que cuando alzaba Moisés su mano, Israel prevalecía; mas cuando él bajaba su mano, prevalecía Amalec. 12 Y las manos de Moisés se cansaban; por lo que tomaron una piedra, y la pusieron debajo de él, y se sentó sobre ella; y Aarón y Hur sostenían sus manos, el uno de un lado y el otro de otro; así hubo en sus manos firmeza hasta que se puso el sol. 13 Y Josué deshizo a Amalec y a su pueblo a filo de espada.
BIBLIA EN UN AÑO: Isaías 44 – 46
MENSAJE
Ayer, dije que ser sumiso a un líder y buscar los intereses comunes por encima de los personales son atributos de un buen seguidor. Hoy, discutiremos más sobre los atributos de un buen seguidor.
Los líderes no son omnipotentes; necesitan ayuda a veces. Los buenos seguidores reconocen que su líder necesita ayuda y buscan proveerla antes de que el líder la pida. Ellos vigilan para ver en qué áreas pueden apoyar al líder, y ayudar en lo que se necesite.
En la lectura Bíblica de hoy, Moisés no le pidió a Arón y a Hur que le ayudaran. Él ni si quiera explicó porqué estaba levantando sus manos hacia el campo de batalla. Los dos le vieron levantar sus manos y se dieron cuentan de que ganaban la batalla cuando él hacía esto. Ellos también se dieron cuenta de que sus manos se estaban cansando, así que fueron hacia él, le dieron una piedra donde sentarse, y le ayudaron con sus manos. Esto es ser un buen seguidor, el tipo de seguidor que hará que un líder supere cualquier montaña que se ponga en su camino.
A veces, apoyar a un líder no sera conveniente. Cuando Arón y Hur ayudaron a Moisés, ellos no estaban sentados, tampoco nadie les ayudaba a mantener las manos de Moisés levantadas. Ellos también debieron de cansarse, pero estuvieron así hasta que se acabó la batalla. A veces, cuando vas a ayudar en la debilidad de un líder, otros quizás se rían de ti incluso te pongan motes. Sin embargo, no debes de fallar a tu líder; debes de soportar lo que venga al ayudarle.
Es algo terrible cuando los seguidores se aprovechan de las debilidades de sus líderes. Algunos seguidores, cómo sus líderes no saben como tener un registro del dinero, empiezan a robar de las cuentas en vez de ayudarles a manejar el dinero. Algunos otros le cuentan a la gente las debilidades de sus líderes para desacreditarlos. Si hay algien en la Biblia que todo seguidor debería estudiar, este es David. Aunque él ya había sido ungido como el siguiente Rey de Israel en 1 Samuel 16:13, y había hecho muchas hazañas (1 Samuel 17:48 – 51; 1 Samuel 18:5 – 7), aunque él había visto las debilidades de Saúl (1 Samuel 16:23), él permaneció fiel y nunca desacreditó al rey. Mientras que huía para salvar su vida porque Saúl intentaba matarle, él tuvo la oportunidad de matar a Saúl pero no lo hizo (1 Samuel 24:4 – 13) – esto es un buen seguidor. Como resultado, él no solo cumplió su destino, sino que además el Rey de reyes, quien también es llamado Hijo de David, vino de su linaje (Apocalipsis 22:16).
PUNTO CLAVE: Nunca intentes aprovecharte de las debilidades de tus líderes. En vez de eso, ayúdales.
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Amén