Memoriza: «Y volviendo el ángel de Jehová la segunda vez, lo tocó, diciendo: Levántate y come, porque largo camino te resta.» 1 Reyes 19:7
Lee: Juan 6.5 – 13
5 Cuando alzó Jesús los ojos, y vio que había venido a él gran multitud, dijo a Felipe: ¿De dónde compraremos pan para que coman estos? 6 Pero esto decía para probarle; porque él sabía lo que había de hacer. 7 Felipe le respondió: Doscientos denarios de pan no bastarían para que cada uno de ellos tomase un poco. 8 Uno de sus discípulos, Andrés, hermano de Simón Pedro, le dijo: 9 Aquí está un muchacho, que tiene cinco panes de cebada y dos pececillos; mas ¿qué es esto para tantos? 10 Entonces Jesús dijo: Haced recostar la gente. Y había mucha hierba en aquel lugar; y se recostaron como en número de cinco mil varones. 11 Y tomó Jesús aquellos panes, y habiendo dado gracias, los repartió entre los discípulos, y los discípulos entre los que estaban recostados; asimismo de los peces, cuanto querían. 12 Y cuando se hubieron saciado, dijo a sus discípulos: Recoged los pedazos que sobraron, para que no se pierda nada. 13 Recogieron, pues, y llenaron doce cestas de pedazos, que de los cinco panes de cebada sobraron a los que habían comido.
BIBLIA EN UN AÑO: 1 Reyes 9:1-10:29 Hechos 9:14-40
MENSAJE
Hace muchos años, me levanté por la mañana sintiéndome depresivo, aunque había estado ayunando por días. Me pregunté si todo lo que estaba haciendo en ese momento valía la pena, porque no me sentía amado por la gente por la que me estaba esforzando; lo único que me decían era, «Daddy haz esto, Daddy haz lo otro» Incluso sus oraciones por mi, normalmente no iban más allá de «Que Dios te guarde para nuestro beneficio»
Un día, estaba dormido cuando una pequeña me despertó y dijo, «Daddy, no conozco la voz de Dios, pero eseta mañana, Él me pidió que te trajera una tarta. Se que no es el diablo porque él no me diría que la diera una tarta a mi pastor». Cuando ella se iba Dios me dijo, «¿Pensé que habías dicho que nadie se preocupaba por ti?» Esto me sacó de mi depresión, y volví a reavivarme para Dios.
Amado, ¿de que formas animas a tu pastor que ha estado orando por ti, tus profesores en la escuela que han estado enseñándote, o tu profesor de Escuela Dominical que siempre está velando por ti y enseñándote los caminos de Dios? Un regalo como signo de tu apreciación puede ser de gran importancia en sus vidas.
LLAMADA A LA ACCIÓN: Haz algo, no importa lo pequeño que sea, para apreciar a alguno de tus líderes esta semana.