Devocional Cielos Abiertos para Adolescentes

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Memoriza: « Y se fue, y comenzó a publicar en Decápolis cuán grandes cosas había hecho Jesús con él; y todos se maravillaban.» Marcos 5:20

Lee: Marcos 5:14 – 20

14 Y los que apacentaban los cerdos huyeron, y dieron aviso en la ciudad y en los campos. Y salieron a ver qué era aquello que había sucedido. 15 Vienen a Jesús, y ven al que había sido atormentado del demonio, y que había tenido la legión, sentado, vestido y en su juicio cabal; y tuvieron miedo. 16 Y les contaron los que lo habían visto, cómo le había acontecido al que había tenido el demonio, y lo de los cerdos. 17 Y comenzaron a rogarle que se fuera de sus contornos. 18 Al entrar él en la barca, el que había estado endemoniado le rogaba que le dejase estar con él. 19 Mas Jesús no se lo permitió, sino que le dijo: Vete a tu casa, a los tuyos, y cuéntales cuán grandes cosas el Señor ha hecho contigo, y cómo ha tenido misericordia de ti. 20 Y se fue, y comenzó a publicar en Decápolis cuán grandes cosas había hecho Jesús con él; y todos se maravillaban.

BIBLIA EN UN AÑO: 2 Samuel 19:11-20:13 Juan 21:1-25

MENSAJE

Cuando nací de nuevo, solía recibir tratamiento para la malaria cada dos semanas. Muchos de mis pastores me predicaron sobre el evitar las medicaciones y ver a Jesús como mi Gran Doctor, pero no les creia. Entonces, un día en la iglesia, un señor mayor compartío un testimonio poderoso. Él dijo que cuando era joven, él contrajo una enfermedad venérea que le producía sensación de ardor. El dolor era tan fuerte que no podía caminar derecho. Sin embargo, durante unas vacaciones en su tierra natal, fue a un evangelismo puerta por puerta. Durante el evangelismo, el diablo le dijo que dejara de decepcionar a la gente porque si Jesús fuera poderoso, Él le hubiera sanado. Él dijo que se enfadó porque el diablo se estaba burlando de Dios, así que rompió su bastón andador, y prefería morir del dolor que permitir que satanás se riera de Dios en su vida. Él se inclinó y continuó andando sin su bastón y dolorido por el resto del evangelismo. Sin embargo, para cuando llegó a casa, el dolor había desaparecido por completo. El testimonio de este anciano me maravilló, así que llevé mi caso delante de Jesús. Puedo decir sin reparos que por más de 35 años ahora, Dios me ha guardado con una salud divina.

¿Ha hecho Dios algo en tu vida? Comparte tu testimonio hoy, para que pueda aumentar la fe de los que te escuchan.

LLAMADA A LA ACCIÓN: Enumera las cosas que Dios ha hecho por ti y compártelas con la gente hoy.

ACERTIJO

¿Qué le sucedió al Rey Nabuconodosor antes de que su reino le fuera restaurado?