Memoriza: “E hizo él también guisados, y se los llevó a su padre, y le dijo: Levántese mi padre, y coma de la caza de su hijo, para que me bendiga.” Génesis 27:31
Lee: Génesis 25:29 – 34
29 Y guisó Jacob un potaje; y volviendo Esaú del campo, cansado, 30 dijo a Jacob: Te ruego que me des a comer de ese guiso rojo, pues estoy muy cansado. Por tanto fue llamado su nombre Edom.[a] 31 Y Jacob respondió: Véndeme en este día tu primogenitura. 32 Entonces dijo Esaú: He aquí yo me voy a morir; ¿para qué, pues, me servirá la primogenitura? 33 Y dijo Jacob: Júramelo en este día. Y él le juró, y vendió a Jacob su primogenitura. 34 Entonces Jacob dio a Esaú pan y del guisado de las lentejas; y él comió y bebió, y se levantó y se fue. Así menospreció Esaú la primogenitura.
BIBLIA EN UN AÑO: 2 Samuel 12:1-31 Juan 16:1-33
MENSAJE
El pasaje Bíblico de hoy muestra que cocinar no está basado en el género. Esaú y Jacob aprendieron a cocinar comidas deliciosas gracias a su madre, Rebeca. No es de extrañar que su padre Isaac, pidiera a su hijo mayor que le preparara una buena comida, para bendecirle. Esto muestra sin niguna duda que aquellos que cocina bien siempre provocan las bendiciones de cualquiera que come su comida.
Cité este pasaje en específico para que supieras que cocinar no está basado en el género. En mis tiempos, a las chicas se les enseñaba a cocinar y hacer las tareas de la casa, mientras que a los chicos se les permitía jugar al fútbol. Sin embargo, en estos tiempos, la linea que divide a los chicos de las chicas está desapareciendo, ya que los dos géneros ahora, tienen intereses en las mismas áreas. De hecho, conozco a algunos chicos que cocinan perfectamente; algunos tienen restaurantes que sirven todo tipo de comidas, desde platos nigerianos hasta cocina internacional.
Aprender a cocinar es una de las cosas más interesantes que puedes hacer. Puedes empezar aprendiendo como cocinar en casa o en la escuela a través de asignaturas como Economía del Hogar o Comida y Nutrición. Aprender a cocinar bien, no solo te ayudará a comer más sano, también te ayudará a ahorrar dinero como adulto.
LLAMADA A LA ACCIÓN: Ofrécete voluntario para cocinar cualquier tipo de comida para tus padres esta semana.