Devocional Cielos Abiertos

DIOS ODIA LAS MENTIRAS

Memoriza: «No habrá allí más noche; y no tienen necesidad de luz de lámpara, ni de luz del sol, porque Dios el Señor los iluminará; y reinarán por los siglos de los siglos.» Apocalipsis 22:15

Lee: Hechos 15:1 – 11

El concilio en Jerusalén

15 Entonces algunos que venían de Judea enseñaban a los hermanos: Si no os circuncidáis conforme al rito de Moisés, no podéis ser salvos. Como Pablo y Bernabé tuviesen una discusión y contienda no pequeña con ellos, se dispuso que subiesen Pablo y Bernabé a Jerusalén, y algunos otros de ellos, a los apóstoles y a los ancianos, para tratar esta cuestión. Ellos, pues, habiendo sido encaminados por la iglesia, pasaron por Fenicia y Samaria, contando la conversión de los gentiles; y causaban gran gozo a todos los hermanos. Y llegados a Jerusalén, fueron recibidos por la iglesia y los apóstoles y los ancianos, y refirieron todas las cosas que Dios había hecho con ellos. Pero algunos de la secta de los fariseos, que habían creído, se levantaron diciendo: Es necesario circuncidarlos, y mandarles que guarden la ley de Moisés.

Y se reunieron los apóstoles y los ancianos para conocer de este asunto. Y después de mucha discusión, Pedro se levantó y les dijo: Varones hermanos, vosotros sabéis cómo ya hace algún tiempo que Dios escogió que los gentiles oyesen por mi boca la palabra del evangelio y creyesen. Y Dios, que conoce los corazones, les dio testimonio, dándoles el Espíritu Santo lo mismo que a nosotros; y ninguna diferencia hizo entre nosotros y ellos, purificando por la fe sus corazones. 10 Ahora, pues, ¿por qué tentáis a Dios, poniendo sobre la cerviz de los discípulos un yugo que ni nuestros padres ni nosotros hemos podido llevar? 11 Antes creemos que por la gracia del Señor Jesús seremos salvos, de igual modo que ellos.

BIBLIA EN UN AÑO: Ezra 1 – 4

MENSAJE

Apocalipsis 22:15 nos dice que por lo que a Dios respecta, los mentirosos y los perros están en la misma categoría. Juan 8:44 dice que el diablo es un mentiroso y el padre de todos los mentirosos, si mientes, estás declarando abiertamente que tu padre es el diablo.

Hace unos años, viaje a Ilesha, y cuando volvía a Lagos, decidí visitar a mi padre en el Señor que ya ha fallecido. Estaba cerca de su casa cuando me acordé de que él nos había enseñado que no fuéramos a visitar a un hombre de Dios con las manos vacías. Así que paré para comprar algunas naranjas en Surulere. Cuando mi padre en el Señor estaba comiéndose las naranjas, él dijo, «Wow, esas naranjas están dulces, ¿las compraste en la carretera?» Entendí que la carretera a la que se refería era la que iba de Ilesha a Lagos, no la de Surulere, sin embargo dije, «Si señor» en el momento en el que dije esto, el Espíritu Santo dijo, «Has mentido». Yo le dije «¿Cuál es la diferencia?, después de todo las he comprado en la carretera en Surulere» Otra vez, el Espíritu Santo dijo, «Has mentido», Yo le dije «¿Cómo afecta esto a la dulzura de las naranjas?»

El Espíritu Santo no me dejó en paz, así que le dije a mi padre en el Señor, «Papa, me acabas de hacer una pregunta, en realidad, compré las naranjas en Surulere» Él asintió con su cabeza y dijo, «Hmmm Espíritu Santo» Él sabía quien estaba lidiando conmigo. Esta es la razón por la que es sorprendente que muchos Cristianos, se han acostumbrado tanto a mentir, incluso en la iglesia. Una lengua mentirosa es una abominación para Dios (Proverbios 12:22) Dios se irrita con las mentiras, sin importar en qué se basa la mentira.

Si Dios odia los labios mentirosos, esto significa que las oraciones de un mentiroso no serán contestadas. Dios no quiere escuchar la voz de un mentiroso. Esta es la razón por la que muchos están sufriendo; las mentiras que les encanta decir se han convertido en una barrera entre ellos y Dios. Mentir puede acortarte la vida. En Hechos 5, el hombre y la mujer que mintieron al representante de Dios cayeron y murieron. Esta es una advertencia para todo hijo de Dios que dice mentiras. Dios no quiere que tu seas destruido. No digas mentiras.

LLAMADA A LA ACCIÓN: Decídete a decir solamente la verdad a partir de ahora.