Memoriza: “Y entró el rey David y se puso delante de Jehová, y dijo: Señor Jehová, ¿quién soy yo, y qué es mi casa, para que tú me hayas traído hasta aquí?” 2 Samuel 7:18
Lee: Lucas 1:46 – 55
46 Entonces María dijo:
Engrandece mi alma al Señor;
47 Y mi espíritu se regocija en Dios mi Salvador.
48 Porque ha mirado la bajeza de su sierva;
Pues he aquí, desde ahora me dirán bienaventurada todas las generaciones.
49 Porque me ha hecho grandes cosas el Poderoso;
Santo es su nombre,
50 Y su misericordia es de generación en generación
A los que le temen.
51 Hizo proezas con su brazo;
Esparció a los soberbios en el pensamiento de sus corazones.
52 Quitó de los tronos a los poderosos,
Y exaltó a los humildes.
53 A los hambrientos colmó de bienes,
Y a los ricos envió vacíos.
54 Socorrió a Israel su siervo,
Acordándose de la misericordia
55 De la cual habló a nuestros padres,
Para con Abraham y su descendencia para siempre.
BIBLIA EN UN AÑO: Deuteronomio 16 – 19
MENSAJE
Un rasgo negativo que he visto en muchos ministros de Dios es el orgullo. Una vez que Dios los llama y los equipa con los dones para su llamado, empiezan a pensar que son especiales. Pero es el caso contrario sin embargo, porque 1 Corintios 1:27 dice que Dios llama al débil, al insensato y aquellos que se consideran nada. Cuando Dios te llama para una tarea, debes de estar extremadamente agradecido a Él por el privilegio de ser llamado y por cada uno de tus logros al caminar en tu llamado porque, sin Él, no puedes hacer nada (Juan 15:5).
Como mencioné anteriormente en esta seria, estudié a la gente que me precedió y aquellos que tuvieron éxito en sus llamados. Uno de ellos fue el apóstol Pablo, Él fue un académico como yo antes de que fuera llamado por Dios. Me di cuenta de que Pablo siempre estaba agradecido a Dios. Él escribió en 1 Tesalonicenses 5:18:
“ Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús.”
En nuestra lectura Bíblica de hoy, vemos como de agradecida estaba María por haber sido elegida poral dar a luz a nuestro Salvador Jesucristo y ella tuvo éxito en su llamado. Si realmente quieres tener éxito en tu llamado, entonces debes de ser agradecido a Dios siempre. No se tu, pero yo nunca podré olvidar lo bueno que Dios ha sido conmigo.
Acabábamos de terminar un servicio en un país extranjero un día y Dios realmente se movió en ese servicio, muchas almas fueron salvados y hubieron todo tipo de milagros. De camino de vuelta al hotel, discutí las grandes cosas que habían sucedido en el servicio con aquellos que estaban conmigo. Cuando llegamos, una persona sentada en el asiento de delante del coche abrió la puerto para bajar y cuando cerró la puerta me pilló el dedo con la puerta. Hasta el día de hoy, no tengo ni idea como me pillé el dedo con la puerta. Clamé de dolor y todo el mundo estaba alrededor mío diciendo, “Lo siento”. Cuando subí arriba, le pregunté a Dios, “Señor, ¿por qué me ocurrió esto?” Él dijo, “Estabas hablando sobre todas las cosas grandes que hice en el servicio y ni siquiera te has vuelto a mi para decir, Gracias Señor”. Me di cuenta de mi error, y le pedí perdón y le di las gracias. Para cuando llegué a la habitación, el dolor había desaparecido por completo.
Dios está vigilando para ver si serás agradecido o no. Él te advertirá una vez o dos, si eres desagradecido. Si te niegas a prestar atención a Sus advertencias, Él quitará Su apoyo y eso será peligroso.
LLAMADA A LA ACCIÓN: Empieza a darle gracias a Dios por todas las cosas que Él ha hecho por ti, especialmente para que puedas cumplir tu llamado.