Memoriza: «y me buscaréis y me hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón.» Jeremías 29:13
Lee: Salmos 63:1 – 8
Dios, satisfacción del alma
Salmo de David, cuando estaba en el desierto de Judá.
1 Dios, Dios mío eres tú;
De madrugada te buscaré;
Mi alma tiene sed de ti, mi carne te anhela,
En tierra seca y árida donde no hay aguas,
2 Para ver tu poder y tu gloria,
Así como te he mirado en el santuario.
3 Porque mejor es tu misericordia que la vida;
Mis labios te alabarán.
4 Así te bendeciré en mi vida;
En tu nombre alzaré mis manos.
5 Como de meollo y de grosura será saciada mi alma,
Y con labios de júbilo te alabará mi boca,
6 Cuando me acuerde de ti en mi lecho,
Cuando medite en ti en las vigilias de la noche.
7 Porque has sido mi socorro,
Y así en la sombra de tus alas me regocijaré.
8 Está mi alma apegada a ti;
Tu diestra me ha sostenido.
BIBLIA EN UN AÑO: Números 30 – 32
MENSAJE
Hebreos 11:6 dice que Dios es el que recompensa a aquellos que le buscan a Él diligentemente. Solo recompensas a alguien que ha hecho algo digno de reportar, y lo ha hecho bien, por lo tanto, lo que el pasaje está diciéndonos realmente, es que Dios quiere que la gente le busque a Él diligentemente. Por eso Dios le dijo a David claramante que buscara Su rostro, ¿y cual fue la respuesta de David?
«Mi corazón ha dicho de ti: Buscad mi rostro. Tu rostro buscaré, oh Jehová;» – Salmos 27:8
David dijo, «Dios, cuando tu me pides que busque. tu rostro, mi corazón dice, «Tu rostro buscaré» Hoy, Dios está pidiéndote que pases tiempo buscando Su rostro. ¿Cual será tu respuesta?
Buscas a Dios a través del estudio de la Biblia y oraciones. Mientras que otros hacen estas cosas como cualquier otra actividad, aquellos que le buscan diligentemente van más allá. Estudian sus Biblias por horas, profundizando más y más en cada tema hasta que realmente entienden la mente de Dios sobre ese tema. Para ellos, orar no es un evento, es un estilo de vida. Cada vez que les ves, están orando porque 1 Tesalonicenses 5:17 dice que debemos orar sin cesar. Cuando ellos realmente apartan un tiempo para orar, no se limitan a juntar palabras, ellos derraman sus corazones para Dios y su anhelo es «Señor, quiero conocerte más». Ellos pasan muchas horas en conversaciones a corazón abierto con Dios.
Amado, busca el rostro de Dios cada día hasta que te duermas, incluso mientras estás durmiendo. Salomón dijo que incluso cuando él está durmiendo, su corazón está despierto, y puede escuchar a sus amados pidiendo venir a Él (Cantares 5:2). David, también describió como él piensa sobre Dios en su cama por la noche y como su alma busca a Dios intensamente en Salmos 63:6 – 8. Estas son descripciones de como se expresa el verdadero amor. ¿Es esta también tu experiencia con Dios como su amado?
Hay una gran recompensa en buscar diligentemente al Señor. Amado, pasa tus días buscando a Dios y a Dios solamente. Búscale a Él mientras que estás comiendo; que todo tu anhelo sea por Él. Cuando le buscas diligentemente, Él se abre a ti de formas que un Cristiano no vea normalmente. Hay cosas que Dios me ha revelado en el Espíritu que no puedo compartir en público porque la gente que no le ha buscado a Él diligentemente quizás nunca las entiendan.
LLAMADA A LA ACCIÓN: Comprométete a buscar el rostro de Dios diligentemente desde ahora.