Memoriza: «Jehová llamó a Samuel; y él respondió: Heme aquí.» 1 Samuel 3:4
Lee: Mateo 11:28 – 30
28 Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar. 29 Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas; 30 porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga.
BIBLIA EN UN AÑO: Números 14 – 15
MENSAJE
De la lectura Bíblica de hoy, vemos que cuando Dios te llama, es una invitación al descanso.
hay una diferencia entre el trabajo duro y otros tipos de trabajo. Dios espera de ti que trabajes. 2 Tesalonicenses 3:19 dice que si no trabajas, no debes comer. Sin embargo, los obreros, especialmente aquellos que trabajan en trabajos laboriosos desde la mañana hasta la noche, al final del día, ganan simplemente lo suficiente para mantener su cuerpo y su alma. Decreto que tu ya no sufrirás antes de que puedas comer, en el nombre de Jesús.
Una de las razones por las que estás leyendo esto ahora es porque Dios te llamó. Cuando Él te llama, Él está diciendo, «Tu destino te está llamando». En Éxodo 3:1 – 10, Moisés estaba al final del desierto cuando de repente vio una zarza ardiendo pero no se consumía. Él dijo, «me apartaré a mirar» Ese fue un llamado, y para cuando Él respondió, Dios le dijo que sus días de vagar por el desierto se habían acabado, y que era tiempo de cumplir su destino. En Marcos 3:13 – 15, Jesús fue a lo alto de la montaña y llamó a aquellos que Él deseaba y ellos vinieron a Él. Aquellas personas (excepto Judas), después se convirtieron en los Apóstoles que conocemos ahora.
La primera cosa que tienes que hacer cuando Él te llama es tomar Su yugo, en otras palabras, hacer de Su deseo tu preocupación, y perseguir las cosas que Él persigue. Cuando piensas en la más importante que Dios persigue, esto son las almas. Si realmente quieres cumplir tu destino, tomarás el yugo de ganar almas, y empezarás a ver cómo Él arregla las cosas para que tu cumplas tu destino.
Mi principal objetivo era convertirme en el Viceconsejero más joven de África, pero Dios me llamó, y tome Su yugo de ganar almas. Así es como llegué a cumplir mi destino y ahora los Viceconsejeros me llaman Padre. Tu no tienes idea de cual es tu verdadero destino hasta que empiezas a ganar almas y hacer la obra de Dios.
En caso de que pienses que el ganar almas es solo para los evangelistas y los pastores, por favor estudia Mateo 28:19 – 20 detenidamente. Todos aquellos que siguen a Jesucristo han sido comisionados para hacer discípulos en todas las naciones, y esto te incluye a ti.
PUNTO DE ORACIÓN: Padre, como a David, permite que el sello de Tu casa me consuma para que pueda cumplir mi destino.