Memoriza: «Entonces dijo el sumo sacerdote Hilcías al escriba Safán: He hallado el libro de la ley en la casa de Jehová. E Hilcías dio el libro a Safán, y lo leyó.» 2 Reyes 22:8
Lee: 2 Reyes 22:8 – 11
8 Entonces dijo el sumo sacerdote Hilcías al escriba Safán: He hallado el libro de la ley en la casa de Jehová. E Hilcías dio el libro a Safán, y lo leyó. 9 Viniendo luego el escriba Safán al rey, dio cuenta al rey y dijo: Tus siervos han recogido el dinero que se halló en el templo, y lo han entregado en poder de los que hacen la obra, que tienen a su cargo el arreglo de la casa de Jehová. 10 Asimismo el escriba Safán declaró al rey, diciendo: El sacerdote Hilcías me ha dado un libro. Y lo leyó Safán delante del rey.
11 Y cuando el rey hubo oído las palabras del libro de la ley, rasgó sus vestidos.
BIBLIA EN UN AÑO: Éxodo 38 – 40
MENSAJE
El templo de Dios es también la casa de conocimiento, es la casa de educación. En Salmos 27:4, David lo dejó claro:
«Una cosa he demandado a Jehová, esta buscaré;Que esté yo en la casa de Jehová todos los días de mi vida, Para contemplar la hermosura de Jehová, y para inquirir en su templo.»
En la casa del Señor, puedes contemplar la belleza del Dios Todopoderoso. Sin embargo, David, siguió diciendo que él no solo quería contemplar la belleza de Dios, sino que también quería estar ahí para inquirir de Él. En otras palabras, si tienes alguna pregunta para Dios, tráela a Su templo, ven a preguntarle en el templo.
Cuando vienes a Su templo, recibes revelaciones; El empezará a decirte ciertas cosas que no aprenderás en casa. Esa es la razón por la que siempre voy a la iglesia con material para escribir. Es un lugar para ir y aprender nuevas cosas y conocer nuevas perspectivas. Ha habido muchas veces en las que, me sentía confundido por un asunto, pero mientras estaba escuchando la palabra de Dios, la luz empezó a brillar en el asunto, y recibí revelaciones en cuanto a como resolver la situación. Esta es la razón por la que el salmista dijo:
«Lámpara es a mis pies tu palabra, Y lumbrera a mi camino.» – Salmos 119:105
La casa de Dios es un lugar donde vas a escuchar la palabra de Dios, y en esa palabra hay gran conocimiento y sabiduría que no puedes encontrar en ningún otro sitio. Así que, ya sea que necesites revelación para tus negocios, familia, problemas, ministerio, salud, o en cualquier otra área de la vida, la conseguirás en la casa de Dios. Aquellos que van regularmente a la iglesia, donde la palabra sin diluir de Dios es enseñada, no se sienten confundidos por mucho tiempo.
Quizás te preguntes ahora, «¿Cómo se si la verdadera palabra de Dios, sin diluir, es enseñada en mi iglesia?» Tendrás que imitar a los Cristianos de Berea, que siempre volvía a sus casas para escudriñar en las Escrituras para verificar lo que les habían enseñado en la iglesia. (Hechos 17:10 – 11).
Siempre y cuando permanezcas en un ambiente en el que la palabra verdadera y sin diluir de Dios es predicada, el conocimiento y la sabiduría estarán disponibles para ti.
LLAMADA A LA ACCIÓN: Siempre atiende a los servicios de la iglesia con materal para escribir, y mantente expectante para recibir nuevo conocimiento y revelación de parte de Dios.