Memoriza: «Y se cumplió la Escritura que dice: Abraham creyó a Dios, y le fue contado por justicia, y fue llamado amigo de Dios.» Santiago 2:23
Lee: Génesis 18:17 – 33
17 Y Jehová dijo: ¿Encubriré yo a Abraham lo que voy a hacer, 18 habiendo de ser Abraham una nación grande y fuerte, y habiendo de ser benditas en él todas las naciones de la tierra? 19 Porque yo sé que mandará a sus hijos y a su casa después de sí, que guarden el camino de Jehová, haciendo justicia y juicio, para que haga venir Jehová sobre Abraham lo que ha hablado acerca de él. 20 Entonces Jehová le dijo: Por cuanto el clamor contra Sodoma y Gomorra se aumenta más y más, y el pecado de ellos se ha agravado en extremo, 21 descenderé ahora, y veré si han consumado su obra según el clamor que ha venido hasta mí; y si no, lo sabré. 22 Y se apartaron de allí los varones, y fueron hacia Sodoma; pero Abraham estaba aún delante de Jehová.
23 Y se acercó Abraham y dijo: ¿Destruirás también al justo con el impío? 24 Quizá haya cincuenta justos dentro de la ciudad: ¿destruirás también y no perdonarás al lugar por amor a los cincuenta justos que estén dentro de él? 25 Lejos de ti el hacer tal, que hagas morir al justo con el impío, y que sea el justo tratado como el impío; nunca tal hagas. El Juez de toda la tierra, ¿no ha de hacer lo que es justo? 26 Entonces respondió Jehová: Si hallare en Sodoma cincuenta justos dentro de la ciudad, perdonaré a todo este lugar por amor a ellos. 27 Y Abraham replicó y dijo: He aquí ahora que he comenzado a hablar a mi Señor, aunque soy polvo y ceniza. 28 Quizá faltarán de cincuenta justos cinco; ¿destruirás por aquellos cinco toda la ciudad? Y dijo: No la destruiré, si hallare allí cuarenta y cinco. 29 Y volvió a hablarle, y dijo: Quizá se hallarán allí cuarenta. Y respondió: No lo haré por amor a los cuarenta. 30 Y dijo: No se enoje ahora mi Señor, si hablare: quizá se hallarán allí treinta. Y respondió: No lo haré si hallare allí treinta. 31 Y dijo: He aquí ahora que he emprendido el hablar a mi Señor: quizá se hallarán allí veinte. No la destruiré, respondió, por amor a los veinte. 32 Y volvió a decir: No se enoje ahora mi Señor, si hablare solamente una vez: quizá se hallarán allí diez. No la destruiré, respondió, por amor a los diez. 33 Y Jehová se fue, luego que acabó de hablar a Abraham; y Abraham volvió a su lugar.
BIBLIA EN UN AÑO: Éxodo 11 – 13
MENSAJE
Te sorprenderá saber que Dios tiene mejores amigos. Los mejores amigos de Dios están tan cerca de Él que saben cosas sobre Él que nadie más conoce. Ellos son personas con conocimiento experimental de Él, que la mayoría de gente no tiene. Ese tipo de personas no les gusta hablar en profundidad sobre cuando de Dios conocen porque aquellos que no han llegado a estar tan cerca de Él no les entenderían.
Abraham era una de los mejores amigos de Dios. Él estaba tan cerca de Dios que Dios dijo que Él no podía hacer nada significativo en la tierra sin informar a Abraham primero (Génesis 18:17). Mosiés también era uno de los mejores amigos de Dios. Él estaba tan cerca de Dios que Dios mismo testificó en Números 12:8, que Él hablaba con Moisés cara a cara, y contemplaba su semejanza, que se traduce como «forma» en inglés moderno. Juan el Amado también era otro hombre que claramante era mejor amigo de Dios. De todas las personas de la tieerra, Jesús decidió decirle a él todas las cosas que sucederían al final de los tiempos (Apocalipsis 1:1)
Todas estas personas tenían una relación con Dios tan cercana, que vieron partes de Él que otros nunca vieron. Ellos escucharon cosas de parte de Él que nadie más sabía y le hicieron cambiar de opinión en varias ocasiones (Génesis 18:24 – 32; Éxodo 32:9 – 14). Probablemente, el ejemplo más obvio se refleja en la relación de Jesús con Pedro, Santiago y Juan mientras que Él estaba en la tierra. Porque ellos estaban con el Señor Jesucristo en la montaña da la transfiguración, ellos vieron Su gloria (Mateo 17:1 – 2)Cuando Él fue a resucitar a la hija de Jairo, él permitió solo a tres personas que fueran con Él, así que ellos vieron Su poder de resurrección (Marcos 5:35 – 37). Ellos estaban tan cerca de él que le vieron en Su tiempo angustia en el jardín de Getsemaní, cuando Él estaba clamando a Dios que apartara esa copa de Él (Mateo 26:36 – 39). Jesús les invitó a ellos a ver con Él de una forma especial. Estos tres, experimentaron momentos especiales con Jesucristo que nadie más ha tenido.
Ciertamente es un honor especial y un privilegio ser uno de los mejores amigos de Dios. Creo que todo creyente sincero debería de desear estar en el círculo de amigos más cercano de Dios, así que estaré hablando de lo que se necesita para convertirse en el mejor amigo de Dios en los próximos dos días.
REFLEXIÓN: ¿Cuán cerca estás de Dios?