Memoriza: «Alborota su casa el codicioso; Mas el que aborrece el soborno vivirá.» Proverbios 15:27
Lee: Proverbios 1:17 – 19
17 Porque en vano se tenderá la red
Ante los ojos de toda ave;
18 Pero ellos a su propia sangre ponen asechanzas,
Y a sus almas tienden lazo.
19 Tales son las sendas de todo el que es dado a la codicia,
La cual quita la vida de sus poseedores.
BIBLIA EN UN AÑO: Apocalipsis 18 – 19
MENSAJE
Proverbios 1:17 – 19 dice que aquel que es codicioso acecha a su propia sangre. Él pone una emboscada a su propia vida. Dios dice que estás esperando destruir tu propia vida cuando eres codicioso. Proverbios 15:26 dice que aquel que es codicioso busca problemas para su propia casa. Tu creas un problema para tu familia cuando eres codicioso. Los hijos pueden meterse en problemas porque sus padres han sido codiciosos.
Hace muchos años, cuando estábamos plantando una Iglesia Cristiana Redimida de Dios en Zambia, un nativo que se suponía que era nuestro representante estaba recolectando dinero con el propósito de construir el edificio de la Iglesia, pero en realidad desviaba el dinero para su uso personal. Un día, su hija estaba jugando con la puerta – una pequeña instalada para evitar que los cabritos entraran a la casa mientras que el aire fresco y la luz natural entraban desde el techo. De repente la puerta se rompió y sus tornillos se soltaron dañando los ojos de la niña y sacándole un ojo. Oré para esa niña, recordándole al Señor el servicio del padre en la Iglesia. el Señor dijo que debería de preguntarle al padre ciertas cosas. Lo hice, explicándole lo que Dios haría si mentía. Con su cabeza agachada y temblando, él dijo, «No he sido fiel. He estado apropiándome del dinero enviado para que yo construyera la iglesia».
Aquellos que son codiciosos quizás exhiban su riqueza obtenida ilícitamente y quieran aparentar ser muy listos, pero así como la palabra de Dios es verdadera, el verdadero dolor de ellos está de camino. Algunos ya están pasando por su propio dolor y se están escondiendo de todo el mundo. No te dejes tentar para convertirte en alguien como ellos, porque no sabes los sufrimientos que ellos están escondiendo en el trasfondo.
La codicia es una invitación para tomar ilegalmente lo que no te pertenece. Lo interesante es que, esa cosa que estás deseando codiciosamente puede ser tuya solo si vas por el proceso correcto pacientemente. Aquellos que permiten que la codicia anule el contentamiento en sus vidas al final perderán lo que tienen. El diablo era un arcángel, pero lo perdió todo porque codiciaba lo que nunca podría tener. Una persona codiciosa no agradece las bendiciones de Dios en su vida y cree que en el acto de robar lo que le pertenece a otras personas.
Piensa en todo lo que Dios ha hecho por ti este año y expresa tu gratitud a Él para que Él puede hacer más por ti en el 2024.
PUNTO DE ORACIÓN: Señor, ayúdame a estar feliz y contento con todo lo que Tú me has dado, en el nombre de Jesús.