Devocional Cielos Abiertos

LA CLAVE PARA LA MULTIPLICACIÓN DIVINA

Memoriza: “De cierto, de cierto os digo, que si el grano de trigo no cae en la tierra y muere, queda solo; pero si muere, lleva mucho fruto.” Juan 12:24

Lee: Proverbios 11:24 – 25

24 Hay quienes reparten, y les es añadido más;

Y hay quienes retienen más de lo que es justo, pero vienen a pobreza.

25 El alma generosa será prosperada;

Y el que saciare, él también será saciado.

BIBLIA EN UN AÑO: 2 Corintios 1 – 4

MENSAJE

 Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos.” – Romanos 8:29

Este versículo nos dice que Dios entregó a Su único hijo para ser crucificado para que él pudiera convertirse en el primogénito de muchos hijos. Cristianos en cada lugar del mundo hoy en día, porque Dios entregó a Su único hijo para ser crucificado. Además, Jesús declaró esta clave para la multiplicación claramente, en nuestro versículo a memorizar de hoy, donde Él dijo que a menos que caiga la semilla en la tierra y muera, no traerá fruto.

Si realmente quieres multiplicación, debes de estar dispuesto a sacrificar lo más preciado que tengas. Proverbios 11:24 dice que cuando retienes más de lo necesario, tenderás a experimentar pobreza, pero cuando esparces los que tienes, cuando lo compartes, estas incrementando. El incremento es bueno, pero la multiplicación es mejor. Cuando das, incrementas, pero cuando sacrificas, estas multiplicando.

En Génesis 22:1 – 18, cuando Dios le pidió a Abraham que entregara a su único hijo y él estaba dispuesto a hacer, Dios dijo, “en bendiciones te bendeciré”. Lo que Abraham hizo fue algo significativo, pero lo que Isaac hizo también fue tremendamente significativo. Isaac solo tenía una vida, aún así no discutió con Abraham. Creo que no le hubiera sido muy difícil escapar si hubiera querido, pero él consintió en ser atado y que le pusieran en el altar como a un animal. Dios por lo tanto dijo que Él bendeciría a Abraham que había dado, pero que multiplicaría a Isaac que había sacrificado.

He sembrado mis coches personales para el evangelio, y he tenido que ir en transporte público para ir a los sitios. Dios respondió a estos sacrificios bendiciéndome con tantos regalos que llegó un punto en el que tuve que anunciar a la gente que dejaran de regalarme coches. Dios sin embargo, no paró de enviarme coches. Hoy en día, viajo en un jet privado que Él me dio.

Amado, el dar en sacrificio es la clava para la multiplicación divina.

PUNTO CLAVE: Antes de que Dios te multiplique, Él quiere asegurarse de que le amas a Él por encima de todo y todos los demás.