Memoriza: “Porque debiendo ser ya maestros, después de tanto tiempo, tenéis necesidad de que se os vuelva a enseñar cuáles son los primeros rudimentos de las palabras de Dios; y habéis llegado a ser tales que tenéis necesidad de leche, y no de alimento sólido.” Hebreos 5:12
Lee: Hebreos 5:11 – 14
Advertencia contra la apostasía
11 Acerca de esto tenemos mucho que decir, y difícil de explicar, por cuanto os habéis hecho tardos para oír. 12 Porque debiendo ser ya maestros, después de tanto tiempo, tenéis necesidad de que se os vuelva a enseñar cuáles son los primeros rudimentos de las palabras de Dios; y habéis llegado a ser tales que tenéis necesidad de leche, y no de alimento sólido. 13 Y todo aquel que participa de la leche es inexperto en la palabra de justicia, porque es niño; 14 pero el alimento sólido es para los que han alcanzado madurez, para los que por el uso tienen los sentidos ejercitados en el discernimiento del bien y del mal.
BIBLIA EN UN AÑO: Marcos 15 – 16
MENSAJE
Cuando un hijo nace, todo el mundo está pendiente de él o ella. No se espera del bebé que haga ninguna tarea en la casa. Sin embargo, cuando empieza a madurar, quizás le manden algún que otro recado. Es de la misma forma en nuestro caminar Cristiano. Cuando alguien recién se convierte naciendo de nuevo, la persona es alimentada por Cristianos maduras. Cuando viene a la iglesia, los obreros le dicen donde aparcar el coche, donde sentarse y atienden a cualquier necesidad que él o ella pueda tener. A medida que la persona continúa yendo a la iglesia y se convierte en un Cristiano maduro, ya no se sentirá cómoda recibiendo cuidados, sino que en ese momento la persona también querrá servir en la casa de Dios.
Un Cristiano que crece espiritualmente se hace más responsable. Ese tipo de Cristiano sacrificará su tiempo porque ahora vive por y para Dios. Sin embargo, están aquellos que han estado asistiendo a la iglesia por años, pero aún así no hacen nada para nadie aparte de atender a los servicios de la iglesia. ¿Cómo puedes estar yendo a la iglesia, sin ser una parte responsable del funcionamiento de la casa de tu Padre? Mientras que otros quizás estén pensando en lo que Dios puede hacer por ellos, un Cristiano que esetá creciendo espiritualmente se centrará en lo que él o ella puede hacer por Dios.
Más allá de hacer la obra de Dios, un Cristiano que está creciendo espiritualmente siempre querrá dar para las cosas del Reino. Así como a Pablo, a esa persona no le importa gastar su tiempo ni ser usado para el progreso del Reino de Dios. Mientras que otros discuten sobre si pagar el diezmo o no, un Cristiano que está creciendo espiritualmente desea dar el 100% de sus ingresos para Dios. Un Cristiano que está creciendo espiritualmente no se quejará cuando el Pastor dice que hay una necesidad en la Iglesia que hay que cubrir, de hecho, él o ella querrá ser la primera persona en cubrir esa necesidad.
Hace muchos años, había un hombre rico que daba regularmente para los proyectos de la Iglesia y además ayudaba a supervisar a aquellos que no podían dar financieramente y contribuían con su esfuerzo. Un día, de repente le vimo quitándose la camiseta y uniéndose a los que trabajaban como obreros. Sorprendidos, le preguntamos porqué, y él dijo que Dios le había dicho, “Tú gran hombre, bien hecho; la gente que está haciendo el trabajo obtendrán la recompensa que tú no tendrás”. El dar tu dinero, tiempo y energía para servir a Dios, con amor, son algunas de las señales de que estás creciendo espiritualmente como Cristiano.
REFLEXIÓN: ¿Estás creciendo espiritualmente?