Devocional Cielos Abiertos

REPRENDE AL DIABLO

Memoriza: “Determinarás asimismo una cosa, y te será firme, Y sobre tus caminos resplandecerá luz.” Job 22:28

Lee: 2 Corintios 10:3 – 6

Pues aunque andamos en la carne, no militamos según la carne; porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas, derribando argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo, y estando prontos para castigar toda desobediencia, cuando vuestra obediencia sea perfecta.

BIBLIA EN UN AÑO: Miqueas 5 – 7

MENSAJE

Siguiendo con lo que empezamos hablar ayer, no solo son brujos y curanderos los que pueden tratar de impedir que una persona cumpla su destino; la enfermedad también puede hacerlo.

Muchas personas permanecen enfermas porque están tolerando la enfermedad. Debes de reprender la enfermedad en tu cuerpo. Oseas 4:6 dice, “Mi pueblo fue destruido, porque le faltó conocimiento.” Ahora que sabes la verdad, puedes decirle a la enfermedad, “¿Cómo te atreves a atacarme a mi, a un hijo o hija del Doctor Original? Mi Padre dice en Éxodo 15:26 que Él es le Señor que me sanó, así que yo estoy sanado en el nombre de Jesús.

Cuando sabes quien eres en Cristo, esto afecta cómo te comportas. Si eres el hijo de un mensajero, tu forma de hablar diferirá de la del hijo de un Presidente. Tu Padre no es solo el Presidente – él es el Presidente de todos los presidentes en todo el mundo (Salmos 24:7 – 10). Él es Aquel del cual Filipenses 2:9- 11 dice que, al escuchar Su nombre, toda rodilla se doblará. Desafortunadamente, muchos Cristianos tienen el nombre pero no lo usan. Debes de reprender a los demonios. Diles “Cómo te atreves a engañarme. Yo soy el hijo del Señor de los ejércitos” Si haces esto, echarás a todo demonio fuera de tu casa hoy. La Biblia deja claro que si tu eres verdaderamente un hijo del Dios viviente, ni siquiera deberías fallar. Filipenses 4:13 dice que puedes hacer todas las cosas en Cristo que te fortalece.

Puedes reprender al diablo mismo. Santiago 4:7 dice que si entregas tu vida a Dios, resistirás al diablo, y él huirá de ti. Cuando sabes quien eres realmente en Cristo, tu confianza se ve en cómo oras. Por ejemplo, si alguien está en el baño y tu llamas a la puerta, la forma en la que la persona que está en el baño te contesta, te dirá si esa peresona es el mensajero de la casa o el dueño. Aunque tanto uno como otro pueden decir lo mismo, el nivel de confianza de sus voces será distinto.

Debes de hablarle al diablo como si fueras alguien que sabe que sabe que el Todopoderoso habita en él o ella. (1 Juan 4:4), y entonces el diablo huirá de ti.

PUNTO DE ORACIÓN: Decreto hoy: Enfermedad, demonios y todo agente del diablo, aparta tus sucias manos de mi vida, en el nombre de Jesús.