Devocional Cielos Abiertos

AGITA EL DON DE DIOS

Memoriza: Por lo cual te aconsejo que avives el fuego del don de Dios que está en ti por la imposición de mis manos.” 2 Timoteo 1:6

Lee:Marcos 4:35 – 41

Jesús calma la tempestad

35 Aquel día, cuando llegó la noche, les dijo: Pasemos al otro lado. 36 Y despidiendo a la multitud, le tomaron como estaba, en la barca; y había también con él otras barcas. 37 Pero se levantó una gran tempestad de viento, y echaba las olas en la barca, de tal manera que ya se anegaba. 38 Y él estaba en la popa, durmiendo sobre un cabezal; y le despertaron, y le dijeron: Maestro, ¿no tienes cuidado que perecemos? 39 Y levantándose, reprendió al viento, y dijo al mar: Calla, enmudece. Y cesó el viento, y se hizo grande bonanza. 40 Y les dijo: ¿Por qué estáis así amedrentados? ¿Cómo no tenéis fe? 41 Entonces temieron con gran temor, y se decían el uno al otro: ¿Quién es este, que aun el viento y el mar le obedecen?

BIBLIA EN UN AÑO: Jonás 1 – 4

MENSAJE

En nuestra lectura Bíblica, Jesús estaba en el bote, aún así había una tormenta. Esto implica que Jesús puede estar en la vida de una persona, y aún así una tormenta puede estar agitándose. Muchos piensan que una vez que nacen de nuevo, se convierten en un lugar prohibido para las tormentas. Esto no es cierto; si acaso, el diablo será más insistente en poner a prueba tu fortaleza en Cristo. Jesucristo dijo claramente en Juan 15:19: “ Si fuerais del mundo, el mundo amaría lo suyo; pero porque no sois del mundo, antes yo os elegí del mundo, por eso el mundo os aborrece.”

El mero hecho de que tu seas un hijo de Dios es suficiente para atraer a las tormentas, pero no te preocupes; siempre y cuando Jesús esté en tu vida, todo lo que tienes que hacer es agitar Su don en ti, y la tormenta cesará. Si eres un hijo de Dios, Jesús ya está en ti, y la Biblia dice en 1 Juan 4:4 que más grande es Él que está en ti, que el que está en el mundo. Puede haber un gigante dentro de ti, pero el gigante puede estar durmiendo hasta que tú le despiertes. 2 Timoteo 1:6 dice que hay un don de Dios en ti, y tu tienes que agitarlo. Salmos 50:14 dice que si vienes a la presencia de Dios con acción de gracias, puedes clamar a Él en el día de tribulación y Él te liberará. Clama a Él hasta que Él se levante por ti, porque está escrito en Salmos 68:1 que cuando Dios se levanta, Sus enemigos se esparcen.

Puedes hacer que el Dios Todopoderoso se levante por ti, por medio de la oración. En Hechos 12:1 – 10, cuando Herodes se llevó a Santiago, la iglesia no oró, y así pues Santiago fue asesinado. Para cuando Pedro fue arrestado, la iglesia había aprendido su lección y así pues oró, haciendo así que el Señor se levantara por ellos para calmar esa tempestad. Si te niegas a orar, la tormenta puede incluso sobrepasarte, pero si oras, entonces ganarás en contra de la tormenta sin importar lo fuerte que esta sea.

Puedes también causar que Él se levanta por tu a través de la alabanza. En Marcos 10:46 – 52, cuando Bartimeo estaba clamando a Jesús, el Señor escuchaba “Jesús, hijo de David…” Así que se paró para atenderle. Cuando le alabas, Él se levanta por ti. Si sabes como clamar a Dios por Sus nombres, en línea con quien Él es realmente, Él prestará atención a tu situación y calmará cualquier tormenta que haya en tu contra.

PUNTO CLAVE: Agita el don de dios en ti y ninguna tormenta podrá sobrepasarte nunca más.