Memoriza: «porque les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como los escribas.» Mateo 7:29
Lee: Hechos 4:23 – 31
Los creyentes piden confianza y valor
23 Y puestos en libertad, vinieron a los suyos y contaron todo lo que los principales sacerdotes y los ancianos les habían dicho. 24 Y ellos, habiéndolo oído, alzaron unánimes la voz a Dios, y dijeron: Soberano Señor, tú eres el Dios que hiciste el cielo y la tierra, el mar y todo lo que en ellos hay; 25 que por boca de David tu siervo dijiste:
¿Por qué se amotinan las gentes,
Y los pueblos piensan cosas vanas?
26 Se reunieron los reyes de la tierra,
Y los príncipes se juntaron en uno
Contra el Señor, y contra su Cristo.
27 Porque verdaderamente se unieron en esta ciudad contra tu santo Hijo Jesús, a quien ungiste, Herodes y Poncio Pilato, con los gentiles y el pueblo de Israel, 28 para hacer cuanto tu mano y tu consejo habían antes determinado que sucediera. 29 Y ahora, Señor, mira sus amenazas, y concede a tus siervos que con todo denuedo hablen tu palabra, 30 mientras extiendes tu mano para que se hagan sanidades y señales y prodigios mediante el nombre de tu santo Hijo Jesús. 31 Cuando hubieron orado, el lugar en que estaban congregados tembló; y todos fueron llenos del Espíritu Santo, y hablaban con denuedo la palabra de Dios.
MENSAJE
A parte de ser una forma de reportar todo lo que amenaza tu paz y gozo, la oración da plenitud al Espíritu.
Esto se explica en hechos 4:31: «Cuando hubieron orado, el lugar en que estaban congregados tembló; y todos fueron llenos del Espíritu Santo, y hablaban con denuedo la palabra de Dios.»
La oración hace que el Espíritu Santo se acerque para ayudarte. Él también nos da la valentía para confrontar al diablo.
Si no eres un Cristiano que ora, probablemente te sientas tímido y confuso porque el Espíritu Santo no está ahí para activarse Su ser en ti.
Cuando pasas tiempo declarando la palabra de Dios en el lugar de oración, estás ejercitando la autoridad que Dios te ha dado para declarar y que las cosas se den.
Cuando una persona de Dios dice una palabra de oración y los milagros se suceden en público, es el resultado de horas invertidas en orar en secreto.
No creas como los publicanos que solo oraban cara al público, ten un altar de oración y hazlo arder con oraciones siempre.
PUNTO DE ORACIÓN: Padre, ayúdame a orar siempre con fervor.