Devocional Cielos Abiertos

¿PUEDE UNO SER PERFECTO?

Memoriza: “Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto.”Mateo 5:48

Lee: Génesis 17:1 – 8

La circuncisión, señal del pacto

17 Era Abram de edad de noventa y nueve años, cuando le apareció Jehová y le dijo: Yo soy el Dios Todopoderoso; anda delante de mí y sé perfecto. Y pondré mi pacto entre mí y ti, y te multiplicaré en gran manera. Entonces Abram se postró sobre su rostro, y Dios habló con él, diciendo: He aquí mi pacto es contigo, y serás padre de muchedumbre de gentes. Y no se llamará más tu nombre Abram,[a] sino que será tu nombre Abraham,[b] porque te he puesto por padre de muchedumbre de gentes. Y te multiplicaré en gran manera, y haré naciones de ti, y reyes saldrán de ti. Y estableceré mi pacto entre mí y ti, y tu descendencia después de ti en sus generaciones, por pacto perpetuo, para ser tu Dios, y el de tu descendencia después de ti. Y te daré a ti, y a tu descendencia después de ti, la tierra en que moras, toda la tierra de Canaán en heredad perpetua; y seré el Dios de ellos.

BIBLIA EN UN AÑO: Oseas 5 – 9

MENSAJE

Dios da instrucciones y dirección a Sus hijos porque les ama generosamente. Él demanda obediencia absoluta porque siempre hay una recompensa relacionada con ello. Finalmente, Él quiere que nosotros seamos como Él, y Él no aceptará nada menos que lo mejor. 2 Timoteo 2:19 dice:

“Pero el fundamento de Dios está firme, teniendo este sello: Conoce el Señor a los que son suyos; y: Apártese de iniquidad todo aquel que invoca el nombre de Cristo.”

Algunas personas argumentan en contra de la perfección, diciendo que mientras estemos vivos en este cuerpo mortal, no podemos ser perfectos. Ellos dicen que todo el mundo es un pecador, y aquellos que dicen ser santos son solo unos hipócritas. Entiendo su punto de vista porque están hablando dese el punto de vista de una persona carnal. La Biblia dice: “Camina en el Espíritu, para no dejarte llevar por los deseos de la carne” Esto significa que una vida en santidad no se consigue por medio de actos humanos sino con la ayuda del Espíritu Santo. Cuando entregas tu corazón humildemente a Dios y le dices lo desamparado que estás en tus debilidades, Él te dará Su fuerza y empezará a guiarte en todas las cosas.

Obedecer a Dios cuando te guía cada día, en la escuela, en cas, en la Iglesia, en tu vecindario, etcétera, es lo que al final te llevará a la perfección.

LLAMADA A LA ACCIÓN: Comprométete a leer y obedecer cada día la palabra de Dios.