Devocional Cielos Abiertos

¿ACUSADO ERRÓNEAMENTE?

Memoriza: “Seis cosas aborrece Jehová, Y aun siete abomina su alma: Los ojos altivos, la lengua mentirosa, Las manos derramadoras de sangre inocente,” Proverbios 6:16 – 17

Lee: Génesis 39:10 – 14

10 Hablando ella a José cada día, y no escuchándola él para acostarse al lado de ella, para estar con ella, 11 aconteció que entró él un día en casa para hacer su oficio, y no había nadie de los de casa allí. 12 Y ella lo asió por su ropa, diciendo: Duerme conmigo. Entonces él dejó su ropa en las manos de ella, y huyó y salió. 13 Cuando vio ella que le había dejado su ropa en sus manos, y había huido fuera, 14 llamó a los de casa, y les habló diciendo: Mirad, nos ha traído un hebreo para que hiciese burla de nosotros. Vino él a mí para dormir conmigo, y yo di grandes voces;

MENSAJE

Hay muchos falsos acusadores en el mundo hoy en día, que harán lo que sea por poner a sus víctimas o a las personas que no pueden defenderse, en problemas. José fue acusado por un superior de haber cometido un crimen del que claramente él había tratado de evitar, pero ¿quién hubiera creído lo contrario? Era la palabra de la esposa de su amo en contra de la suya. Sin embargo, después de muchos años de castigo, Dios organizó una situación que al final posicionó a José en el trono.

Uno de los puntos destacados del texto Bíblico de hoy es que los falsos acusadores recibirán una recompensa vergonzosa cuando Dios finalmente vengue a la persona que fue acusada erróneamente. Puedo imaginar que la esposa de Potifar era una de aquellas que se postraron ante José después de que fuera nombrado Primer Ministro de Egipto.

Otro punto es que cuando Dios te venga, no necesitas tomar ninguna represalia. En vez de planear una estrategia para su venganza, José se centró en la nueva tarea que el Faraón le había dado, la cual implicaba que él tenía que dar de comer a su antiguo amo y su esposa durante el periodo de hambruna.

LLAMADA A LA ACCIÓN: Pídele al Espíritu Santo que haga que te resulte fácil perdonar a cualquiera que te haya causado daño o dolor como resultado de una falsa acusación.