Devocional Cielos Abiertos

NO TE INCLINES

Memoriza: “No erréis; las malas conversaciones corrompen las buenas costumbres.” 1 Corintios 15:33

Lee: Daniel 3:18 – 30

18 Y si no, sepas, oh rey, que no serviremos a tus dioses, ni tampoco adoraremos la estatua que has levantado. 19 Entonces Nabucodonosor se llenó de ira, y se demudó el aspecto de su rostro contra Sadrac, Mesac y Abed-nego, y ordenó que el horno se calentase siete veces más de lo acostumbrado. 20 Y mandó a hombres muy vigorosos que tenía en su ejército, que atasen a Sadrac, Mesac y Abed-nego, para echarlos en el horno de fuego ardiendo. 21 Entonces estos varones fueron atados con sus mantos, sus calzas, sus turbantes y sus vestidos, y fueron echados dentro del horno de fuego ardiendo. 22 Y como la orden del rey era apremiante, y lo habían calentado mucho, la llama del fuego mató a aquellos que habían alzado a Sadrac, Mesac y Abed-nego. 23 Y estos tres varones, Sadrac, Mesac y Abed-nego, cayeron atados dentro del horno de fuego ardiendo.

24 Entonces el rey Nabucodonosor se espantó, y se levantó apresuradamente y dijo a los de su consejo: ¿No echaron a tres varones atados dentro del fuego? Ellos respondieron al rey: Es verdad, oh rey. 25 Y él dijo: He aquí yo veo cuatro varones sueltos, que se pasean en medio del fuego sin sufrir ningún daño; y el aspecto del cuarto es semejante a hijo de los dioses.

26 Entonces Nabucodonosor se acercó a la puerta del horno de fuego ardiendo, y dijo: Sadrac, Mesac y Abed-nego, siervos del Dios Altísimo, salid y venid. Entonces Sadrac, Mesac y Abed-nego salieron de en medio del fuego. 27 Y se juntaron los sátrapas, los gobernadores, los capitanes y los consejeros del rey, para mirar a estos varones, cómo el fuego no había tenido poder alguno sobre sus cuerpos, ni aun el cabello de sus cabezas se había quemado; sus ropas estaban intactas, y ni siquiera olor de fuego tenían. 28 Entonces Nabucodonosor dijo: Bendito sea el Dios de ellos, de Sadrac, Mesac y Abed-nego, que envió su ángel y libró a sus siervos que confiaron en él, y que no cumplieron el edicto del rey, y entregaron sus cuerpos antes que servir y adorar a otro dios que su Dios. 29 Por lo tanto, decreto que todo pueblo, nación o lengua que dijere blasfemia contra el Dios de Sadrac, Mesac y Abed-nego, sea descuartizado, y su casa convertida en muladar; por cuanto no hay dios que pueda librar como este. 30 Entonces el rey engrandeció a Sadrac, Mesac y Abed-nego en la provincia de Babilonia.

MENSAJE

La presión de grupo es cuando las intenciones o acciones de una persona, en su mayoría negativas, están influenciadas por personas de su grupo de edad o entorno social. La razón más obvia por la que muchos jóvenes sucumben a la presión de sus compañeros es simplemente para tener un sentido de pertenencia.

Vivimos en una sociedad donde los jóvenes se distraen fácilmente con lo que la gente publica en sus redes sociales, mientras que esas cosas a veces no son ciertas. Escuché de un joven influencer que posó frente a un automóvil Bentley nuevo para tomar una foto que publicó en su estado. Luego de que muchos de sus seguidores le mandaran mensajes de felicitación, se abrió para decir que la foto la tomó cuando iba a celebrar con un amigo que acababa se acababa de comprar ese coche.

Los hijos de Dios que están seguros de su identidad en Cristo no necesitan ceder a la presión de sus compañeros. Te exhorto a que seas como los niños hebreos del texto de hoy. Decide no sucumbir a la presión negativa que puede empañar tu salvación o tu buen nombre.

PUNTO DE ACCION: ¿Qué estás haciendo para propagar el evangelio?