Devocional Cielos Abiertos

NO LUCHES CON DIOS

Memoriza: «¡Ay del que pleitea con su Hacedor! ¡El tiesto con los tiestos de la tierra! ¿Dirá el barro al que lo labra: Qué haces?; o tu obra: ¿No tiene manos?»Isaías 45:9

Lee: Isaías 45:9 – 10

¡Ay del que pleitea con su Hacedor! ¡El tiesto con los tiestos de la tierra! ¿Dirá el barro al que lo labra: Qué haces?; o tu obra: ¿No tiene manos? 10 ¡Ay del que dice al padre: ¿Por qué engendraste? y a la mujer: ¿Por qué diste a luz?!

BIBLIA EN UN AÑO: 2 Samuel 8 – 11

MENSAJE

En continuación con la discusión que empezamos ayer, el lado que tu eliges determina contra quien luchas. Si tu eliges el lado de Dios, estarás luchando en contra del diablo y sus demonios. Si desobedeces al Señor, entonces estás eligiendo el lado del diablo y estarás luchando en contra de Dios. Créeme, honestamente, no quieres luchar en contra de Dios. Él es demasiado grande para que te posiciones en contra de Él y sobrevivas.

Dios tiene Su forma de lidiar con la gente que elige el lado del diablo a través de la desobediencia hacia Él. Una forma es quitarle Su apoyo a la persona como hizo con Josué 7:1 – 12 cuando Josué falló porque había acomodado el pecado en su campamento. Otra forma es abandonar a la persona por completo como hizo con Sansón en Jueces 16:18 – 31. Hay muchas personas experimentando esto hoy en día, pero no se dan cuenta de que Dios está luchando en contra de ellos, así que siguen luchando sin darse cuenta de que aquel contra el que están batallando es imposible de vencer.

Había un abogado que una vez me dijo que diezmar era solo una forma de los pastores, de recaudar el dinero que tanto esfuerzo le había costado de ganar a la gente. Traté de explicarle que el diezmar era un mandamiento de parte de Dios pero él se negó a escuchar, así que le dije: «¿Puedo pedirle a Dios que pruebe el mismo a través de ti, si el diezmar es Su voluntad o no?» Él respondió, «Ora es a oración», así que lo hice. Este brillante abogado perdió tres casos que estaba llevando, justo después de nuestro incidente. Esto afectó a su reputación y perdió algunos negocios. Este hombre también poseía una pastelería y de repente, durante la época festiva, cuando la mayoría de los pasteleros tenían una demanda muy alta y muchas ventas, todos sus trabajadores decidieron dimitir de sus trabajos. Él les ofreció el doble de sus salarios pero ellos insistieron en que querían dejarlo. Por mucho que lo intentó no pudo hacer volver a sus trabajadores. Después de que se diera cuenta de que todo lo que estaba sucediendo debía de ser Dios luchando contra él, vino a mi y dijo, «Estoy de acuerdo con que el diezmar es una mandamiento de Dios, por favor, ora por mi». Oramos una oración simple; él apeló los tres casos que había perdido y los ganó todos ellos. Sus trabajadores también volvieron al trabajo con él y todo volvió a la normalidad.

Amado, desobedecer a Dios es lo mismo que luchar en contra de Él y hay de aquel que lucha en contra de su Creador (Isaías 45:9).

PUNTO CLAVE: Cuando desobedeces a Dios, estás tomando el lado del diablo y luchando en contra de Él.