Memoriza: “orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu, y velando en ello con toda perseverancia y súplica por todos los santos;” Efesios 6:18
Lee: Efesios 6:10 – 18
La armadura de Dios
10 Por lo demás, hermanos míos, fortaleceos en el Señor, y en el poder de su fuerza. 11 Vestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo. 12 Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes. 13 Por tanto, tomad toda la armadura de Dios, para que podáis resistir en el día malo, y habiendo acabado todo, estar firmes. 14 Estad, pues, firmes, ceñidos vuestros lomos con la verdad, y vestidos con la coraza de justicia, 15 y calzados los pies con el apresto del evangelio de la paz. 16 Sobre todo, tomad el escudo de la fe, con que podáis apagar todos los dardos de fuego del maligno. 17 Y tomad el yelmo de la salvación, y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios; 18 orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu, y velando en ello con toda perseverancia y súplica por todos los santos;
BIBLIA EN UN AÑO: 2 Samuel 4 – 7
MENSAJE
Los seres humanos tienen que enfrentarse a todo tipo de guerras desde que nacen hasta el día que dejan esta tierra. Génesis 38:27 dice que cuando una mujer está con dolores de parto, esta laborando. Después de dar a luz, el bebe empieza a enfrentarse a todo tipo de enemigos – conocidos y desconocidos. En mateo 10:36, Jesucristo mismo dijo que los enemigos del hombre serán los de su casa. Si el Señor te muestra a todos los relativos, familia y amigos que han deseado tu muerte en tu infancia, te sorprenderás, pero gracias a Dios que sobreviviste.
Cuando hablamos sobre los enemigos en tu casa, puedes ser tu padre e incluso tu madre. Si no crees que los padres pueden ser los enemigos de sus hijos, lee Génesis 27, donde verás cómo una madre conspiró en contra de su propio hijo para negarle sus bendiciones.
Siempre me he preguntado sobre cuando Dios le dijo a Abraham que sacrificara a Isaac para Él, e Isaac preguntó donde estaba el cordero de sacrificio. Su padre, en vez de decirle la verdad, le dijo, “Dios proveerá”. Isaac debió mirar a su alrededor, asombrado mientras que su padre le ataba, pensando. “¿Así que yo soy el carnero?”:
¿Qué hay de los suegros? Lee 1 Samuel 18:28 y verás un hombre – el Rey Saúl, descrito como el enemigo de su yerno – David. Y ya no hablemos de las brujas y lo hechiceros, principados y potestades, etcétera (Efesios 6:12). En esta batalla, hay dos ejércitos diferentes luchando por las almas de los hombres. Puedes decidir estar del lado del ejército celestial o el ejército de los demonios – no puedes ser neutral.
Lo que determina el lado que eliges son tus acciones e inacciones. Si eliges el lado de Dios, entonces te apartarás del pecado y harás todo lo que Él te pida en tu vida diaria. Aquellos que eligen el lado del diablo, viven conforme a lo que les dicta su carne, y cometen pecado. Para aquellos que se mantienen alejados del pecado, acabarán victoriosos y llegarán al cielo al final (Apocalipsis 3:5), mientras que aquellos que cometen pecado acaban en el lago de fuego con el diablo y sus demonios (Mateo 25:41). La elección está en tus acciones.
REFLEXIÓN: Examina tu vida y se sincero contigo mismo: ¿estás del lado de Jesucristo o del diablo?