Memoriza: “He aquí que yo soy Jehová, Dios de toda carne; ¿habrá algo que sea difícil para mí?” Jeremías 32:27
Lee: 2 Reyes 5:9 – 14
9 Y vino Naamán con sus caballos y con su carro, y se paró a las puertas de la casa de Eliseo. 10 Entonces Eliseo le envió un mensajero, diciendo: Ve y lávate siete veces en el Jordán, y tu carne se te restaurará, y serás limpio. 11 Y Naamán se fue enojado, diciendo: He aquí yo decía para mí: Saldrá él luego, y estando en pie invocará el nombre de Jehová su Dios, y alzará su mano y tocará el lugar, y sanará la lepra. 12 Abana y Farfar, ríos de Damasco, ¿no son mejores que todas las aguas de Israel? Si me lavare en ellos, ¿no seré también limpio? Y se volvió, y se fue enojado. 13 Mas sus criados se le acercaron y le hablaron diciendo: Padre mío, si el profeta te mandara alguna gran cosa, ¿no la harías? ¿Cuánto más, diciéndote: Lávate, y serás limpio? 14 Él entonces descendió, y se zambulló siete veces en el Jordán, conforme a la palabra del varón de Dios; y su carne se volvió como la carne de un niño, y quedó limpio.
BIBLIA EN UN AÑO: 1 Tesalonicenses 3 – 2 Tesalonicenses 3
MENSAJE
Una vez escuché la historia de un hombre que visitó el cielo y volvió. Él dijo que en el cielo, le mostraron una habitación donde había muchas piezas de repuestas de partes del cuerpo humano. Cuando preguntó para que estaban todas esas piezas ahí, le dijeron que estaban ahí para dárselas a gente en la tierra cuyas partes del cuerpo quizá hayan sido dañadas y necesitaban unas nuevas. Eso son buenas noticias para alguien que necesita una nueva parte del cuerpo, pídele a Dios la tuya hoy y Él te la dará de este almacén.
La Biblia dice que la piel de Naaman se volvió como la de un bebé. Eso era una nueva piel. en Marcos 3:1 – 5, el Señor Jesús le dio al hombre con una mano seca otra mano. En Juan 9:1- 7, Jesús se encontró con un hombre que había nacido sin ojos y Él le dio unos ojos nuevos. Siempre que leas en la Biblia que Jesús curó a un leproso, lo que sucede es que sus dedos cortados o sus orejas son reemplazadas con unas nuevas.
Dios puede reemplazar esa parte de tu cuerpo que necesita un cambio, si se lo pides.
Había una familia en la que los padres eran profesores, pero su hijo no era muy listo. Si tuviera que describirle, en mi lengua nativa, diría que en donde se supone que tenía que estar el cerebro solo había agua. Este chico nunca aprobó ningún examen. Él siempre era el último en su clase, con los peores resultados. Cuando se cambio de una clase con 33 estudiantes a una de 40, su posición se movió de la 33 a la 40. Sus padres le consiguieron los mejores profesores, y aún así seguía suspendiendo. Un día, tuvimos un programa en la universidad donde ellos vivían; oramos una oración simple por este chico. En el siguiente examen que hizo el chico, él quedó el primero de la clase. Sus profesores dijeron que no era posible porque ellos sabían que incluso si al chico se le dieran las respuestas para copiar en el examen, él las hubiera copiado mal. Así que le dieron otro test y él tuvo incluso una mejor nota en se examen. Dios le había dado un cerebro nuevo.
Mi Padre es el Dios de toda carne. Él tiene todas las piezas de repuesto del ser humano en Su almacén; simplemente pídele y Él te dará lo que necesitas. Nada es demasiado difícil para Él.
LLAMADA A LA ACCIÓN: Cuéntale a Dios sobre esa nueva parte del cuerpo que necesitas - ya sea tu cerebro o cualquier otra parte del cuerpo, cuéntale sobre ello ahora. Si no necesitas una nueva parte del cuerpo, pide por alguien que conoces que la necesita.