Memoriza: «No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.» Romanos 12:2
Lee: Mateo 5:14 – 16
La luz del mundo
14 Vosotros sois la luz del mundo; una ciudad asentada sobre un monte no se puede esconder. 15 Ni se enciende una luz y se pone debajo de un almud, sino sobre el candelero, y alumbra a todos los que están en casa. 16 Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos.
BIBLIA EN UN AÑO: Santiago 1:1 – 27; Ezequiel 20 – 21
MENSAJE
Me asombro cuando los Cristianos tratan de copiar las modas del mundo. Los Cristianos quieren vestirse como la gente del mundo, hablar y comportarse como ellos, cuando la Biblia dice que aunque estamos en el mundo, no somos de este mundo. Por ejemplo, hace un tiempo, escuché que había algo llamado «el desafió de la silueta», en el que chicas jóvenes bailaban desnudas y lo grababan con las luces apagados. Era triste ver como algunas Cristianas se lanzaban a hacer ese desafío también. Es obvio que muchas personas están en la Iglesia pero no necesariamente son seguidores de Cristo. No puedes ser un seguidor de Cristo y seguir las modas del mundo. ¿Puede un siervo servir a dos señores? No.
Sé que como joven, hay una presión constante por hacer cosas que te harán ser aceptado por tus amigos. La pregunta es: ¿a quien has sido llamado a complacer -a la gente o a Dios? La ironía de todo este asunto es que las personas a las que buscas complacer siguiendo sus modas saben la verdad; saben que lo que están haciendo está mal pero se sienten bien cuando ven que tú les copias a ellos, y entonces empiezan a aplaudirte para que no pares de hacerlo. Se sabio, en vez de seguir sus modas, se creativo, haz tu propia moda, y que haz que tus amigos sigan tu moda y hagan que otros también la sigan. Que otros vean a Cristo en ti y a través de ti.
LLAMADA A LA ACCIÓN: Crea modas basadas en la palabra de Dios, para que el mundo las copie.