Memoriza: “El varón se enriqueció, y fue prosperado, y se engrandeció hasta hacerse muy poderoso” Génesis 26:13
Lee: Marcos 5:25 – 29
25 Pero una mujer que desde hacía doce años padecía de flujo de sangre, 26 y había sufrido mucho de muchos médicos, y gastado todo lo que tenía, y nada había aprovechado, antes le iba peor, 27 cuando oyó hablar de Jesús, vino por detrás entre la multitud, y tocó su manto. 28 Porque decía: Si tocare tan solamente su manto, seré salva. 29 Y en seguida la fuente de su sangre se secó; y sintió en el cuerpo que estaba sana de aquel azote.
BIBLIA EN UN AÑO: Zacarías 1 – 6
MENSAJE
Una forma de actividad demoníaca – llamada Regresión, es cuando una persona intenta avanzar un paso hacia delante, pero se encuentra retrocediendo dos pasos hacia atrás. Una fuerza invisible parece estar empujando a la persona hacia atrás. Esto es peor que una supresión porque, mientras que la supresión significa que la persona se queda siempre en el mismo punto, en la regresión, la persona en realidad está retrocediendo.
Leemos sobre la mujer con el flujo de sangre en nuestro texto Bíblico de hoy vemos que ella intentó mejorar, pero seguía yendo a peor hasta que se encontró con Jesús.
Quizás te encuentres en una situación similar. Quizás, cuanto más intentas salir de la pobreza, parece que cada vez te adentras en ella más profundamente. Hoy, el Dios Todopoderoso te liberará de las manos del diablo en el nombre de Jesús.
Hace muchos años, un hombre muy rico y su esposa tuvieron una discusión. Mientras que estaban intercambiando palabras, ella le dijo a él que para cuando ella acabara con él, él sería tan pobre que tendría que ir andando cada vez que tuviera que ir a algún sitio. Él se rió de lo que ella dijo porque tenía catorce coches, así que no se le pasaba por la cabeza la posibilidad de tener que andar a ningún sitio, pero él no tenía ni idea de que estaba casado con una bruja. En poco tiempos, sus finanzas empezaron a disminuir. Él trató e intentó pero seguía retrocediendo. Él vendió todos sus coches menos uno. Al final, tenía solo 50 céntimos con él y estaba hambriento. Pensó, “Si uso este dinero para comprar comida, no tendré dinero para gasolina, y tendré que andar como dijo mi esposa. Por otro lado, si uso el dinero para gasolina, moriré de hambre”. En este punto, él corrió a la Iglesia buscando ayuda. Dios le liberó y todo lo que había perdido fue restaurado.
Amado, si has notado que retrocedes una y otra vez, en vez de avanzar hacia adelante, entonces es posible que tu regresión esté causada por un demonio.
Hoy, decreto que eres libre de esos demonios, en el nombre de Jesús.
PUNTO DE ORACIÓN: Padre, por favor, destruye todo lo que esté causando regresión en vez de progreso en mi vida, en el nombre de Jesús.